A nivel global y europeo, los fondos que mejor se han comportado han sido los de materiales. En EEUU también destacaron los de consumo discrecional. Los perjudicados a nivel global fueron las telecomunicaciones; en Europa, la tecnología de la información y consumo discrecional. Por capitalización, en EEUU destacan las pequeñas compañías; en Japón, las medianas, y en Europa solo se salvan las medianas. Los fondos de crecimiento han batido a los de valor.
En bonos corporativos, los gestores mantienen una posición cautelosa porque se espera que la continua caída de las acciones presente una oportunidad de entrada. El mercado primario sigue parado, ya que los emisores esperan más calma para lanzar sus títulos. Las volatilidades implícitas se han mantenido planas, los diferenciales de crédito se han disparado, salvo en Europa donde se mantuvieron estables.
Los convertibles europeos se ha mantenido planos. El crecimiento de los bonos gubernamentales indica una mejora de la confi anza en el sistema fi nanciero. En Europa, los recientes problemas de déficit se han centrado en Grecia y Portugal. Los periféricos siguen ofreciendo diferenciales altos, lo que podría ofrecer oportunidades atractivas de inversión y constituir así una nueva demanda de deuda pública. Los inversores han preferido invertir en deuda a corto plazo. El investment grade y high yield se han comportado bien, la mayoría con una beta alta, sin necesidad de aumentar más la liquidez y con diferenciales altos. Con beneficios en emisiones privadas, la demanda de high yield ha sido baja las últimas dos semanas.
El comportamiento de la deuda emergente en divisa local ha sido positivo, gracias a la subida de los países latinoamericanos y asiáticos que compensó la bajada de Europa del este, por los problemas de Grecia. En materias primas, el DJ UBS Commodity TR terminó en positivo. Los fondos que mejor se comportaron son los invertidos en industriales, seguido de los energéticos y los que apostaron por crudo y gasóleo. Los fondos agrícolas más destacados son los de trigo, maíz y soja. Los perjudicados fueron los de gas natural.