La primera de las muestras, la XI semestral Independent Advisor Outlook Study, realizada a casi 900 gestores RIA que manejan en conjunto más de 204.000 millones de dólares en activos, encontró que el 45% de los asesores independientes es optimista ante el comportamiento en los próximos seis meses. Sin embargo, una segunda encuesta, realizada a 504 inversores de alto patrimonio encontró que sólo el 29% de ellos mira con buenos ojos la marcha de los mercados.
En cuanto a la capacidad de los gestores de capear el temporal y salir airosos en sus apuestas de inversión, el 32% de los inversores consultados consideró que será un trabajo difícil para sus asesores, mientras que un 25% apostó porque será una labor fácil. Asimismo, cuando los inversores encuentran dificultades a la hora de lograr sus objetivos de inversión se muestran benevolentes pues tienden a culpar al entorno antes que señalar directamente a sus gestores.
Desde el punto de vista del gestor, la barrera más grande a la que se enfrentan actualmente es el bajo rendimiento de las inversiones, ya que un 57% teme que esto pueda sucederles. Tras ello, el 37% percibe como obstáculo las pérdidas que registran los mercados, mientras que casi tres de cada cinco, es decir, el 59% de los asesores independientes confiesa que será difícil lograr los objetivos de sus clientes.
En este sentido, Bernie Clark, vicepresidente y responsable de Schwab Advisor Services, apunta que lo importante ante el escenario que atravesamos actualmente es la confianza que los inversores depositan en sus gestores a largo plazo, puesto que el bombardeo de información sobre mercados y datos macroeconómicos es tal que a veces es complicado percibir entre tanto ruido e interpretar la información para alcanzar los objetivos a largo plazo.
Los asesores independientes siguen viendo el cielo más azul que sus clientes, puesto que confían en que se producirán mejores datos económicos en los próximos seis meses. En este sentido, el 31% de los inversores cree que el desempleo aumentará frente a un 18% de los asesores que piensan del mismo modo. El 27% de los inversores de alto patrimonio creen que habrá otra u una doble recesión en comparación con el 14% de los asesores que contemplan esa posibilidad. El 60% de los inversores creen que aumentará la inflación frente al 44% de sus gestores que se ponen de su lado. Asimismo, el doble de gestores ve a corto plazo un descenso en el precio de la energía, un 16% frente a un 8%. Los dos grupos parecen ponerse de acuerdo, el 57% de ellos por un lado y el otro, en que aumentará el consumo y un 33% de los gestores frente al 30% de sus clientes apuestan a que aumentará el ahorro.
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