"Un fondo con 200 valores en cartera no puede controlar las empresas en que invierte"

“Después de todo lo visto en la crisis financiera, nuestro objetivo es analizar cómo los inversores pueden ayudar a la sociedad. Es decir, como la comunidad inversora puede mejorar las prácticas de gobierno en las compañías en las que está invirtiendo”, explica Charles Cronin, responsable de la división sobre Integridad de los Mercados Financieros para EMEA en CFA Institute. En este sentido, CFA Institute se ha unido al Foundation for Governance Research and Education (FGRE) para realizar un estudio sobre los retos que afrontan los grandes inversores internacionales a la hora de mejorar el buen gobierno de las empresas. Los resultados de ese grupo se conocerán en abril de 2011.

En un momento en que Basilea III está aumentando los requisitos de capital de las entidades financieras, las empresas deberán ir al mercado y los inversores deberán obligar a ese mejor gobierno corporativo por parte de las empresas. “Se habla mucho del too big to fail, pero es mucho más importante imponer a las empresas un buen gobierno corporativo a través de los aspectos más pequeños de las compañías”, explica. En este sentido, cree que se debe buscar una nueva relación entre los accionistas y las compañías.

“Se dan situaciones curiosas. En Reino Unido, los accionistas tienen límites para tomar endeudamiento, mientras que las compañías no los tienen. Los accionistas con poder deben usar su influencia para llevar a la compañía por el camino del buen gobierno corporativo”, explica. Una referencia clara a los fondos de inversión y grandes inversores institucionales.

Uno de los objetivos del estudio que están realizando es identificar las trabas que encuentran estos accionistas para mejorar las prácticas de las empresas en las que invierten. En el mismo camino va el Green Paper sobre Gobierno Corporativo publicado por la Comisión Europea. En el mismo, se toman medidas para que en las instituciones financieras se encuentre separado el cargo de consejero delegado y presidente, o el de director financiero y control de riesgo, actividades que deben reportar directamente al consejero delegado.

Al analizar el número de impedimentos que existen para desarrollar unas buenas prácticas de gobierno, reconoce que muy pocos tienen el mecanismo para alcanzar este objetivo. Los planes de pensiones demandan información sobre las empresas y los fondos de inversión se enfrentan cada día a analizar las compañías en las que invierten. Pero, ¿realmente pueden hacerlo? “Un fondo de inversión con 200 valores en cartera y con dos gestores no tiene manera para controlar todas las compañías que tiene en cartera”, señala Cronin. En este sentido, cree que una cartera con un número elevado de acciones busca la diversificación pero, por el contrario, pierde la posibilidad de controlar las acciones que tiene en cartera.

En relación a la Directiva sobre abuso de mercado cree que los supervisores se enfrentan a un reto: el aumento en el número de emisiones y la proliferación de operaciones en torno a la acción de la compañía. “Si existen otros vehículos cotizados sobre el valor, como los estructurados, no se incluyen en la directiva, pero también están influyendo en el valor”, explica. En este sentido, proponen la obligación de que todas las personas que puedan tener información sobre el precio se encuentren supervisadas y no sólo las entidades financieras. Algo que apunta a los periodistas.

Otros aspectos a tener en cuenta son la manipulación de precios del mercado, la fragmentación de las bolsas y la ejecución de las operaciones. “El mercado gris tiene influencia en las transacciones que se realizan en el mercado oficial”, explica.

En su opinión, el software de ejecución rápida de órdenes también está influyendo en la fijación de los precios del mercado. Cronin señala que esto se debe a la gran fragmentación existente en los mercados y las diferencias existentes entre los precios de oferta y de demanda. “Las grandes ordenes realizadas por estos modelos de ejecución rápida provocan que se terminen fijando mal los precios y haya manipulación en los mismos”, explica.