Un americano en París

David_Ross
Financiere de l'Echiquier

David Ross, CFA, es graduado por la Universidad de Yale y Siracusa y prácticamente ha desarrollado toda su carrera profesional en EE.UU. Fue gestor de acciones de pequeña y gran capitalización y responsable de un fondo de acciones emergentes, pero es actualmente es el gestor del fondo Echiquier World Equity Growth de la Financiere de l'Echiquier (LFDE). Un americano en París. Tras cuatro años en la boutique de inversión francesa, donde gestiona un fondo de acciones globales, que en prácticamente todos los trimestres ha superado a su índice de referencia, no hay duda de que David Ross y LFDE encajan perfectamente. 

Ross gestiona un fondo global de acciones de empresas de crecimiento, sin restricciones ni limitaciones respecto del benchmark y, principalmente, de alta convicción. "Sólo invertimos en empresas líderes. El número uno de su industria. No estamos a la caza historias de recuperaciones de los resultados. En eso somos un poco perezosos. Queremos empresas con negocios que funcionan y que ya están creciendo", señala Ross. Las empresas en las que invierte están en primera línea en términos de innovación, lideran y crean mega tendencias e impactan ampliamente la forma en que opera su industria. Según el gestor, los inversores quieren invertir en sus "mejores ideas, no en las peores ideas", el fondo tiene sólo 21 posiciones. El número clave de un fondo de convicción. Las 10 mayores posiciones suponen típicamente cerca del 60% de la cartera.

Sin restricciones geográficas o sectoriales, la distribución del fondo es el resultado de un enfoque básico bottom-up. "Donde encontramos el crecimiento es donde queremos invertir. No importa si es en EE.UU., Japón o China. Nos enfocamos en las empresas que muestran capacidad para hacer crecer sus ingresos y son líderes en su industria. ¿Y por qué elegimos las empresas líderes? Las mayores empresas del mundo presentan una ventaja competitiva sostenida que las empresas más pequeñas no consiguen. Las pequeñas empresas pueden beneficiarse de las megatendencias, pero son las grandes empresas las que las crean ", destaca el gestor de entre muchas otras ventajas como una mayor eficiencia en la gestión de las cadenas de suministro o unos costes unitarios bajos que sólo la escala puede proporcionar. 

Una de las adiciones recientes a la cartera es Microsoft. A la vista de los criterios que rigen la gestión del fondo, ésta no tuvo oportunidad de entrar en cartera mientras no superara el 8% de crecimiento de los ingresos. "Una de las mayores tendencias que observamos en el mercado es la digitalización y la inteligencia artificial, y la empresa norteamericana capitaliza en esta tendencia. Hace 10 años creíamos que Microsoft era 'noticia de ayer', pero, en realidad, está en el centro de todo lo que es tecnológico hoy en día", explica Ross, hablando de una empresa que conoce y en la que invierte desde que era de pequeña capitalización. "Los expertos en inteligencia artificial dicen que Microsoft tiene los mejores datos del mundo. Facebook tiene datos, Google también, pero la presencia de Microsoft en el segmento empresarial, o de subsidiarias suyas como Linkedin o Skype, le proporcionan la mejor base de datos del mundo. ¡Y los datos son el nuevo petróleo!", apunta.

También invierte en empresas de servicios, desde Amazon, con sus servicios de nube y ventas en línea, a Visa y Mastercard, en el ámbito de los pagos; pero también en Salesforce, Alibaba, Adobe ... "Otra mega tendencia que observamos afecta al sector asegurador en los mercados emergentes. El crecimiento de la clase media en estos países es clave. Y a medida que las familias tienen más patrimonio, más gastan para proteger sus activos y sus propias vidas ", añade. El AIA Group, una de las mayores posiciones del fondo, navega esta tendencia.

De 9.000 empresas, 21 ideas

"Nuestras empresas tienen que ser probadamente vencedoras", comenta. Y para identificar las mejores ideas, el equipo de David Ross parte de un universo inicial de 9.000 empresas. Filtrando el tamaño, quedan 1.200. Filtrando las ventas: 900. Por el crecimiento de ingresos de al menos un 8%: 200. Y son estas 200 las que constituyen su universo de inversión. De ahí, el equipo pasa a los filtros cualitativos para responder a cuatro preguntas. "¿Es una empresa disruptora? ¿Es una empresa líder en su industria? ¿Presenta una perspectiva de crecimiento creíble? ¿Tiene ventajas competitivas que protegen el negocio?".  Con las respuestas, la construcción de la cartera sigue cuatro reglas en función de una estrategia central y tres estrategias satélite. "Por regla general, tenemos al menos el 40% en empresas expuestas al crecimiento mundial y este bloque central, típicamente, representa el 60% de la cartera. Después, con un peso de entre el 0% y el 20% del fondo, tenemos los líderes regionales, donde encajan algunas acciones de mercados emergentes. Los líderes cíclicos, como algunas empresas de materiales y, por fin, las empresas bluechip growth”. Esta última categoría incluye empresas cuyos ingresos pueden crecer más lentamente, pero que debido a su tamaño y escala, muestran un crecimiento de beneficios muy superior. "Hablo de empresas como Thermo Fisher o Microsoft", explica David Ross. De aquí surgen, entre 20 y 30 ideas de inversión. Sin embargo, el gestor concluye subrayando su convicción: "No recuerdo la última vez que invertí en 30 posiciones”.