UBS Global AM: los valores con sesgo de crecimiento están más baratos que los de valor en EEUU

El crecimiento de los beneficios más rápido que la media del mercado en un escenario de bajos tipos de interés; unos múltiplos por debajo de la media y de los niveles previos a la crisis que dejan patente el atractivo de las valoraciones; y una mayor concentración de los ingresos fuera de EEUU. Son las razones que esgrime Joshua Chisari, director ejecutivo y responsable de relaciones con los clientes en CCR AM, perteneciente a UBS Global AM, a favor de la inversión en valores con sesgo de crecimiento en el mercado estadounidense y que resumen la filosofía del fondo UBS (Lux) USA Growth.

“Tanto por parte de la producción industrial como del consumo las perspectivas son positivas, impulsadas por la debilidad del dólar y la mejora del sentimiento propiciada por los recortes de impuestos”, comenta Chisari, muy positivo con la evolución de los beneficios, que ya en el cuarto trimestre de 2010 mostraron una fortaleza no vista desde 2007. Y eso, sin contar con que las compañías del S&P 500 sorprendieron al mercado con un incremento de sus ingresos superior al previsto en un 70% de los casos. Unos ingresos que, si hace 15 años provenían de fuera del país, ahora llegan al 40%, lo que permite a las firmas estadounidenses aprovechar el potencial de crecimiento emergente y especialmente chino. Como otro punto a favor, el experto señala el comienzo de los castos en capital.

Y todo, en un escenario en el que los bajos tipos de interés continuarán ya que la inflación “no es un riesgo real aún”, según Chisari, y en el que los valores de crecimiento cotizan con un descuento frente a los de sesgo valor. Para aprovechar esas oportunidades, el producto de UBS Global AM se centra en valores de calidad y crecimiento infravalorados por el mercado, clasificados en tres grupos. El primero de ellos, el de crecimiento clásico, suele ocupar la mitad de la cartera y está formado por grandes negocios que las fluctuaciones de mercado dejan a precios atractivos, como McDonald’s o Praxair.

Cobertura y diversificación

Unas posiciones principales completadas por otras más “exóticas”, como las llamadas compañías de crecimiento elitista, con entre un 35% y un 45% del patrimonio, como Google o Apple, y en las que el mercado puede valorar incorrectamente una fase de gran crecimiento. Por último, con entre el 5% y el 10% de las posiciones están las firmas de crecimiento cíclico, más dependientes del momento, como las firmas de servicios petroleros –dependientes del precio de las materias primas- o los hoteles, que suelen crecer en momentos distintos que las de crecimiento clásico y aportan diversificación al fondo. “Tienen gran potencial y funcionan como cobertura de otras posiciones”, explica. De hecho, actualmente suponen en torno al 10%.

Entre sus favoritos figuran firmas como Amazon, Exxon Mobil, Google, Las Vegas Sands y priceline.com, las de mayor contribución al riesgo de la cartera. “Nuestro riesgo está alineado con nuestras convicciones”, comenta el experto. Por sectores, las mayores sobreponderaciones con respecto al benchmark están en tecnología de la información, consumo discrecional, servicios de telecomunicaciones y materiales. Otros, como energía o consumo básico, “cuentan con el componente de crecimiento pero carecen de atractivas valoraciones”, dice Chiari. Como parte de su estrategia vendedora, han cambiado en los últimos meses posiciones desde firmas con reservas petroleras en Oriente Medio a aquellas con reservas en EEUU.

Y es que todos los valores que conforman la cartera, que se encuentran entre 35 y 55, responden a dos preguntas: la primera se refiere al atractivo del modelo de negocio de crecimiento y la segunda, a su valoración. Para ello, y frente a otros analistas que utilizan el PER como base, en UBS Global AM se basan en el análisis DCF, consistente en fijar el precio objetivo en función no de los beneficios estimados a 10 o 15 años, sino a entre 3 y 5 años. Una estrategia que permite al fondo ofrecer retornos del 9,5% en lo que va de 2011 y por encima del 20% a un año.