Traspaso de la crisis financiera a la economía real

En octubre continuó la venta indiscriminada a nivel mundial. Los precios se han visto afectados por el continuado desapalancamiento y el traspaso de la crisis financiera a la economía real. Los mercados no estadounidenses de acciones han sufrido un mayor castigo, ya que EEUU y Reino Unido se benefician de su condición de mercados relativamente defensivos. En EEUU, a pesar de la aprobación del TARP, el S&P 500 cerró el mes con una caída del 17%, donde los sectores que mejor se comportaron han sido los defensivos (telecom y utilities). En Europa, las mayores pérdidas se han concentrado en el financiero, industrial y de materiales. Como consecuencia del aumento de la aversión al riesgo, los mercados desarrollados han batido a los emergentes en las últimas semanas.

En renta fija, los fondos de Gobiernos a corto plazo han atraído unas primas excesivas para su consideración de refugio en la reciente confusión del mercado. Los diferenciales frente al grado de inversión están ahora en niveles extremos en comparación con sus medias históricas, pero la liquidez de los mercados de crédito aún es limitada. Las medidas de emergencia tomadas con respecto al recorte de tipos, junto con los sucesivos recortes una vez desaparecidos los temores de inflación, han sido los causantes del empinamiento de la curva de tipos. Los fondos de bonos ligados a la inflación han caído desde finales de agosto, debido principalmente a caída del precio de las materias primas, primeros signos de recesión y revisiones a la baja en las previsiones de inflación. Esta tendencia a la baja se ha acentuado desde 6 de octubre donde la aversión al riesgo, alcanzando niveles extremos, y el masivo desapalancamiento de hedge funds ha provocado un flight to quality que ha beneficiado a los bonos de gobierno, por la prima de liquidez. Los fondos de deuda emergente han sufrido sustancialmente y el JPMorgan Index ha caído un 16% (su mayor caída desde su inicio en 1994) y donde las divisas de los emergentes junto con los mercados locales han sufrido su peor mes en la historia. El principal cambio que se percibe fue la venta indiscriminada de las posiciones emergentes de los hedge funds, obligados a vender para hacer frente a los reembolsos.

Los niveles de volatilidad han ido superándose en octubre. Las estrategias alternativas sobre volatilidad son las únicas que están batiendo al resto de mercados, con puntuales sorpresas positivas en el terreno de los CTA’s.

Los fondos de materias primas han sufrido fuertes correcciones al descontarse una sensible reducción de la demanda. El precio del petróleo ha caído sustancialmente cerrando el mes en los 68$ tras haber superado los 146$ el barril en julio. El oro, a pesar de haberse considerado siempre como un activo refugio en las crisis, no se ha librado y cerró el mes con una caída del 17%.