Como era de esperar, Vladimir Putin se ha alzado con la victoria en las elecciones presidenciales rusas celebradas el pasado domingo. Suponiendo que los resultados de los comicios no deriven en una mayor agitación social, hay cuatro razones por las que conviene sobreponderar el mercado de renta variable ruso, según asegura Russ Koesterich, responsable de estrategia de inversión de iShares en un artículo publicado en su blog.
En primer lugar, este experto cita una cuestión de valoraciones. “Pese a que el MSCI Russia ha subido en lo que va de año un 25%, las valoraciones que ofrece este mercado siguen siendo atractivas, al continuar moviéndose por debajo de su valor contable”. De hecho, Koesterich considera que la Bolsa rusa está incluso barata en comparación con los estándares que representan los mercados emergentes. “En el corto plazo, su mercado podría subir incluso más”, asegura.
En segundo término, el responsable de estrategia de inversión de iShares señala la subida experimentada por el precio del petróleo. A su juicio, a diferencia de la mayoría de los mercados emergentes asiáticos, Rusia debería realmente beneficiarse si el precio del barril de crudo sigue encareciéndose, sobre todo teniendo en cuenta que el sector energético representa más del 50% de la capitalización bursátil del MSCI Russia. “En otras palabras, sobreponderar este mercado es de alguna manera jugar a que los precios del crudo se mantengan elevados”.
Una tercera razón por la que, en opinión de Koesterich, conviene elevar la exposición al país son sus favorables perspectivas económicas. “Este año Rusia debería mostrar un crecimiento relativamente fuerte, de aproximadamente el 3,5%, siendo además probable que la inflación se reduzca desde el 8,5% de 2011 hasta niveles próximos al 6%”. A todo esto hay que añadir –recuerda el experto.- un nivel de endeudamiento muy bajo, que actualmente es menos del 10% de su PIB.
En último término, están cuestiones políticas. “Tras la victoria de Putin es probable que el nuevo Gobierno ponga en marcha reformas significativas, siendo además probable que el presidente ponga en marcha estímulos fiscales en el corto plazo”, lo que, según Koesterich, “debería hacer mejorar sus perspectivas de crecimiento, dándole al país una ventaja en un entorno de bajo crecimiento económico a nivel mundial”. Si bien este experto reconoce que, por lo general, no le suelen gustar los mercados de Europa del Este, “Rusia es una excepción”.
