MF Global había acumulado 6.300 millones de dólares en bonos de deuda soberana europea de corto plazo antes de su colapso, 3.200 millones de ellos de bonos italianos. La posición italiana preocupó a los inversores y a las agencias de rating, lo que precipitó su bancarrota el pasado 31 de octubre.
El bróker vendió 1.500 millones de dólares de deuda de la eurozona en los días previos a su caída, y los 4.800 restantes los colocó KPMG. Soros Fund Managment compró deuda por valor de 2.000 millones de dólares con vencimiento en diciembre de 2012, según Wall Street Journal. El problema es que 600 millones de dólares de los 1.200 millones de los clientes de MF Global están desaparecidos, algo que investigan las autoridades de Reino Unido.
Soros anunció el pasado verano que dejaría de gestionar dinero para clientes externos, devolviendo 1.000 millones a los inversores, pues su compañía está centrada ahora en gestionar el dinero de su familia, que asciende a 26.000 millones de dólares.