Soluciones de ciclo de vida, más que una fecha objetivo

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Cedida por BBVA AM

TRIBUNA de Ana Belén García Chamorro, directora de Innovación y Desarrollo de Producto en BBVA Asset Management. Comentario patrocinado por BBVA AM.

Los fondos de inversión llamados de ciclo de vida (target date funds o life cycle funds en su denominación anglosajona) no son nuevos, de hecho existen desde la década de los 90.

Su característica fundamental, que es la de fijar una fecha fija para la estrategia, e ir reduciendo la participación en activos de riesgo a medida que se acerca dicha fecha, los hace vehículos enormemente adecuados para canalizar el ahorro cuando existe una fecha final para ese ahorro. Es el caso por ejemplo del ahorro para la jubilación. Así lo han entendido varios reguladores y los han elegido incluso como una de las opciones posibles en los planes de contribución obligatoria de los empleados tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido. Y ya en nuestro país, el Gobierno Vasco en su actividad reguladora de las Entidades de Previsión Social Vascas o EPSVs ha señalado la obligatoriedad de la existencia para cada EPSV individual de una estrategia de ciclo de vida y la necesidad de ofrecer dicha estrategia como la opción por defecto a sus socios.

Ahora bien, también existen algunos artículos que señalan que una aproximación simplista de ciclo de vida con un porcentaje de renta variable que va disminuyendo en favor de la renta fija, según una senda (glide path) fijada de antemano no es la más óptima. Igualmente varias voces se alzaron críticas cuando la crisis de mercado de 2008 disparó las pérdidas en algunos fondos con horizontes cercanos, más allá de lo esperado.

Ambas lecciones son interesantes y muy aplicables a la gestión de los fondos de ciclo de vida. Igual que en el mundo de los fondos de asignación de activos de tipo perfilado hemos asistido a una importante evolución desde los mixtos tradicionales a los fondos dinámicos y a la incorporación paulatina de nuevas primas alternativas, todo ello es igualmente aplicable a los fondos de ciclo de vida. Las primas de riesgo no se acaban en la renta variable y la renta fija, por tanto es necesario incorporar el resto de activos en las carteras de los target date funds. Es fundamental, por ejemplo incorporar activos cuyo objetivo sea la protección contra la inflación, y estos deben cobrar más importancia a medida que nos acercamos a la fecha objetivo. Igualmente, es necesario incluir primas de riesgo alternativas, que aporten la descorrelación necesaria con los activos tradicionales, y actúen de colchón cuando se produce la corrección (inevitable en los mercados) de dichos activos tradicionales.  Por otra parte la gestión de los fondos de ciclo de vida debe ser igual de dinámica que la del resto de los fondos multiactivo. La existencia de una senda prefijada no significa que sobre esa senda no deban abrirse los márgenes necesarios para que los gestores puedan adaptar la cartera a su visión del mercado en cada momento, así como poner en marcha las coberturas necesarias en su caso.

Una estrategia de inversión de ciclo de vida así construida aportará todas las ventajas de sobra conocidas para un ahorrador con un objetivo finalista: poder ahorrar en un único vehículo hasta la llegada de la fecha objetivo, sin minimizar la inversión en activos de riesgo al principio de la inversión y adaptándose de forma continua a la evolución del propio horizonte temporal.

Los objetivos finalistas van más allá del objetivo de la jubilación, son objetivos que podemos identificar con cualquier hito de nuestra vida. Identificar un objetivo vital para el ahorro, fijar el horizonte temporal para dicho objetivo vital y establecer una estrategia de ahorro periódico es la mejor manera para hacer realidad dicho objetivo. Como el runner que decide correr en un año una maratón, tiene la inspiración (el objetivo), tiene la estrategia (entrenar) y tiene la fuerza de voluntad (hacerlo cada día), para el ahorrador que tiene un objetivo, y la disciplina (aportación periódica), una excelente estrategia es utilizar fondos target date, eligiendo el horizonte temporal adecuado.

En BBVA fuimos pioneros en la estrategia de ciclo de vida en España lanzando en 2003 planes de pensiones garantizados con esta filosofía. Actualmente contamos con la estrategia de ciclo de vida, tanto en planes de pensiones y EPSVs como en fondos de Inversión para dar solución a cualquier objetivo vital de nuestros clientes. Con 1.600 Millones de € gestionados en esta estrategia, más de cien mil ahorradores ya están confiando en nosotros para conseguir sus objetivos a través de las gamas BBVA Mi Objetivo y BBVA Jubilación.