Los inversores portugueses tienen un marcado perfil conservador. Sólo el 26,5% de las familias cuentan con activos financieros, según un informe de la CMVM sobre el perfil del inversor particular de Portugal, publicado por el diario OJE. Entre las familias que tienen al menos un vehículo de inversión, el 65,3% invierte exclusivamente en depósitos a plazo o certificados de ahorro.Según el supervisor portugués, esto se debe a que los activos tradicionales de menor riesgo y que no exigen elevados conocimientos por parte de los inversores, siendo generalmente suscritos por grupos de edad más elevada y con menor nivel cultural. Sólo el 9,2% de las familias que participaron en la encuestase pueden considerar inversores. Es decir, destinaron ahorros a productos en los que corren algún tipo de riesgo inherente a la inversión en mercados de valores. Otra conclusión de la CMVM fue la relación entre inversión en los mercados y el nivel de renta, cultural y profesional de los inversores.Según un estudio de ActivoBank7 con datos de la Federación Europea de Bolsas de Valores, las familias portuguesas no destinan más del 9,9% del valor de mercado de las empresas de su bolsa local. Esta cifra es inferior al 15% que tenían al principio de la década o al 20% de España, el 26,6% de Italia o el 19,4% de Grecia.
Sólo el 25% de las familias portuguesas tienen activos financieros
