Selectivos en investment grade norteamericano, la apuesta de Deutsche Bank en renta fija para 2019

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Félix Prado on Unsplash

Deutsche Bank avanza que la economía mundial crecerá en 2019, pero que lo hará a un ritmo menor que en 2018. De acuerdo con los cálculos presentados por Rosa Duce, Economista Jefe de Deutsche Bank en España, y Diego Jiménez-Albarracín, responsable de Renta Variable del Centro de Inversiones de Deutsche Bank España, el conjunto de la economía global conseguirá mantener un crecimiento superior al 3,5% gracias al empuje de la economía estadounidense. En la eurozona y en los mercados emergentes, los indicadores de confianza anticipan una ralentización de la actividad.

De la economía norteamericana esperan que mantenga su solidez. No obstante, señalan que la guerra comercial ha empezado a hacer mella sobre el sector exportador, y las continuas subidas de tipos lo están haciendo sobre el sector inmobiliario. “En 2019 podría crecer un 2,4%, una cifra muy lejos de la recesión”, puntualizan. Por otro lado, apuntan que la Reserva Federal podría subir tipos otra vez en diciembre y al menos dos veces más en 2019.

En Europa, la perspectiva es que los tipos suban, pero de forma muy lenta. “Podría haber una primera subida del tipo depo (actualmente en el -0,4%) en la última parte del año. El BCE ha prolongado el programa de compra de deuda hasta diciembre. A partir de 2019 seguirá reinvirtiendo los vencimientos de su cartera y no subirá los tipos al menos hasta después de verano. Es posible que apruebe medidas adicionales (nueva TLTRO) para cubrir problemas de financiación puntuales”, señala Duce

En términos de crecimiento económico, prevén que la eurozona se mantenga por encima del potencial, con un aumento del PIB del 1,6%. “Los indicadores de confianza muestran una ralentización de la actividad, derivada de las tensiones comerciales”, explica Duce. “El sector exterior es el más afectado, pero aun así prevemos que el crecimiento se mantenga por encima del potencial”, añade. En este sentido, mirarán muy de cerca algunos factores políticos de riesgo como el desafío presupuestario italiano o el acuerdo en torno al Brexit.

En este entorno, los analistas de Deutsche Bank consideran que existen en renta fija oportunidades selectivas en títulos corporativos. “La entidad prevé que, en EEUU, los tipos a 10 años podrían subir a un año vista hasta el 3,25%-3,5%. Mientras, en Europa, los tipos a 10 años podrían subir también, pero los riesgos políticos y las tensiones comerciales limitarían dicho incremento”, afirman.

“El fuerte crecimiento, la baja probabilidad de recesión y la solidez de los balances empresariales apoyarían a los bonos investment grade de EEUU. En Europa, tanto los títulos investment grade como high yield serían atractivos, tras las ampliaciones de las primas de riesgo de las últimas semanas”, señala Jiménez-Albarracín. En cuanto a los bonos emergentes, “aquéllos en divisa fuerte ofrecen rentabilidades atractivas, pero las tensiones comerciales y la subida del dólar hacen que sólo apostemos por títulos en divisa fuerte”, añade Jiménez-Albarracín.

Pese a la incertidumbre comercial, la subida del dólar y las subidas de tipos de la Reserva Federal, la entidad piensa que los fundamentales económicos mantendrán en niveles elevados las tasas de crecimiento económico de los países emergentes. Para 2019 pronostican un crecimiento del 5%. “Consideramos que China es clave. Su gobierno está aprobando medidas de estímulo para frenar los costes del mayor proteccionismo”, argumenta Duce.

Por otro lado, Jiménez-Albarracín considera que en estos momentos las bolsas no están recogiendo la situación económica y empresarial. “En EEUU, la fortaleza del crecimiento económico se traduciría en mayores beneficios y esto podría llevar al índice S&P a los 2.950 a un año vista”, puntualiza.

Según los analistas de Deutsche Bank, las caídas registradas en octubre y noviembre no se corresponden con los fundamentales económicos y empresariales y han colocado las valoraciones en niveles mucho más atractivos. “En Europa, las dudas políticas han generado un sentimiento negativo que ha pesado más que los beneficios empresariales. A corto plazo el potencial de subida está limitado por estos problemas”, contextualizan. Asimismo, en emergentes, destacan que la subida de tipos de la Reserva Federal y las tensiones comerciales han provocado una rebaja en las perspectivas de beneficios.