Schroders cifra en 55.000 millones de euros un rescate a España

Después del rescate a Grecia, la gestora británica Schroders se ha atrevido a cuantificar el coste de unos “improbables” rescates a Portugal y España, que calcula en 55.000 millones de euros sólo para este año en el caso español y en 13.000 millones para el luso. Aunque cree que los países mediterráneos no están bajo la misma presión que el país heleno, considera que si el mercado de deuda desvía su atención hacia Portugal, "esperaríamos un rescate similar".

La UE se lo podría permitir, pero sería mucho más preocupante si Madrid requiere medidas del mismo calado en los próximos meses, según el informe sobre el Punto de vista Económico y Estratégico del economista jefe de Schroders, Keith Wade. La gestora apunta que en lo que va de ejercicio, España ha obtenido financiación por unos 58.000 millones y estima que necesita un total de 113.000 millones para el conjunto del año.

Con todo, las alertas están centradas en Grecia, que podría presentar un escenario de "impago técnico", resultante de una potencial "reestructuración voluntaria de sus obligaciones de deuda". "El temor a un impago no es sólo visible en las rentabilidades del bono a diez años, sino también en la agudización de la curva invertida”. Pero Keith Wade recuerda también que "Grecia no es el único país europeo que afronta unos mayores costes de financiación", situando a Portugal en primera línea de fuego. Y es que los CDS a cinco años del país luso se han disparado desde los apenas 70 puntos básicos de enero hasta alcanzar hoy el récord de 349 puntos básicos, por encima incluso del registrado en países como Letonia.

Huida hacia la calidad y depreciación del euro

Aun así, no todo es negativo: Keith Wade identifica al menos dos grandes "efectos positivos" de la crisis griega. El primero de ellos tiene un alcance limitado sólo a las grandes potencias europeas. A pesar del delicado contexto, "los bonos de Alemania y Francia se han comportado relativamente bien desde el inicio del año", sacando partido de la "huida del capital hacia la calidad". El segundo es el incentivo extra que provoca la caída del euro en la competitividad de las economías europeas. La gestora británica señala que una depreciación del 10% en la divisa comunitaria podría devolver la competitividad de las exportadoras de la eurozona a niveles de 2003.

En el informe, la gestora considera que la economía mundial continúa fortaleciéndose y sorprendiendo, liderada por los Estados Unidos y las economías emergentes; de ahí que hayan movido su modelo de asignación de activos hacia una propia de una fase de recuperación del ciclo.