Según el diario Valor, la decisión entierra una lucha de poder que comenzó hace casi dos años, en la que estaban involucrados Flores y el presidente del Banco de Brasil, Aldemir Bendine.
Varios medios locales aseguran que desde 2011 se han sucedido tantas intrigas y conflictos entre las cúpulas del Banco de Brasil y de Previ, integradas por miembros del partido de Rousseff (PT), que la presidenta ha decidido apartar a Flores para resolver la divisón.
La decisión de destituir a Flores sería parte de su estrategia de blindar el BB. Según ha indicado el Gobierno, Dan Conrado, vicepresidente del banco, asumirá en los próximos días la presidencia del fondo de pensiones. Conrado es, según el Estadão, aliado del ministro de Economia, Guido Mantega y de Bendine.