RCM: neutrales en bolsa hasta que se ponga en precio una solución creíble para Europa

A pesar del terremoto y la crisis nuclear en Japón, los mercados de renta variable se han recuperado. Desde RCM, de Allianz Global Investors, creen que habrá cuatro factores o fuerzas motrices que determinen el movimiento de los mercados en los próximos meses: los signos de un crecimiento económico global más débil, la subida de tipos de interés por parte de los bancos centrales en varias economías, los elevados precios de las materias primas y la crisis periférica europea. Con respecto a su asignación de activos, dicen que una vez los mercados empiecen a poner en precio una solución creíble para la zone euro y los difererenciales de deuda comiencen a estrecharse, se volverán posititivos en renta variable europea, según explican en sus perspectivas de cara al tercer trimestre del año.

En renta variable global, su posición es neutral, debido a la conjunción de factores de riesgo con otros más alentadores. Entre los primeros, el encarecimiento de la energía (“una fuerte demanda con unas condiciones de oferta estrechas así como una política monetaria acomodaticia contribuirá a unos precios de materias primas altos”) o la crisis europea, que, a pesar del rescate de la última semana, seguirá siendo un factor determinante para la evolución de los mercados. Entre los segundos, una política monetaria que sigue siendo “la fuerza estimulativa más poderosa en el mundo desarrollado” y que está siendo exportada al mundo emergente –que a su vez disfrutan de un crecimiento mucho mayor y cuentan con otros instrumentos para frenar la economía al margen de los tipos, como la apreciación de las divisas o de los requisitos de reservas-. Y también el momentum económico: “El escenario más probable es un contexto ligeramente negativo durante dos trimestres que siguen al pico en datos económicos que ocurrió en febrero de este año, por lo que en un horizonte de un año esperamos subidas”, afiman.

Esa posición neutral, sin embargo, es cautelosa. Aunque reconocen que ha habido correcciones cercanas al 10% en algunos mercados, prefieren esperar antes de añadir más renta variable a sus carteras; al menos, hasta que no vean que el indicador de flujos de entrada es convincente, momento en el que considerarán adoptar una posición larga en acciones de forma táctica.

Por regiones, la visión de RCM es neutral con respecto a bolsa estadounidense, pues juegan en contra sus altas valoraciones pero consideran que la baja ciclicalidad del mercado en tiempos de bajo crecimiento es un factor positivo. Tampoco les gusta Japón, el mercado más cíclico, pero han aumentado su visión positiva en bolsa emergente, que se beneficia del ambiente de bajos tipos y de la alta rentabilidad de sus empresas.

Con respecto a los bonos públicos mantiene la cautela ante el escaso valor que ofrecen. “La inflación subirá y preferimos invertir en bonos corporativos en vez de gubernamentales, pues nuestro contempla una ralentización económica en vez de un duro atterizaje”.