Hay casi 3.000 ETF registrados para su venta en Europa. Según datos de Refinitiv a cierre de mayo, son concretamente 2.836 productos. Sin embargo, solo 160 de ellos cuentan con un volumen de activos superior a los 1.000 millones de euros, lo que demuestra que el patrimonio está altamente concentrado. Estos 160 ETF atesoran 432.000 millones, lo que representa prácticamente el 60% de los activos que tiene la industria de fondos cotizados a nivel europeo. Sólo 20 de los 51 proveedores de ETF cuentan con patrimonios superiores a los 1.000 millones, siendo BlackRock (333.000 millones en activos y el 46,3% de cuota de mercado) la líder indiscutible de la industria europea. Le siguen muy de lejos DWS (78.000 millones) y Lyxor (60.000). El top 10 concentra el 93% del total, por lo que las 41 promotores restantes se reparten el 7% restante.
Esta concentración también se produce a nivel de producto. Aquí el ranking también está dominado por BlackRock. Nueve de los diez fondos cotizados con mayor volumen llevan la marca iShares. El pleno lo rompe Vanguard con su ETF sobre el S&P 500, el segundo con más patrimonio a nivel continental. Los diez fondos cotizados con más patrimonio aglutinan actualmente 118.000 millones, lo que supone el 16,4% del total. Siete son productos de renta variable, mientras que tres de renta fija. La estrategia que más activos absorbe es el iShares Core S&P 500 UCITS ETF, su producto estrella sobre el S&P 500. En este sentido, resulta significativo que los productos más demandados sean aquellos que replican los principales índices bursátiles. En renta fija, el producto estrella es su producto de renta fija corporativa europea, el iShares Core Corporate Bond UCITS ETF.
