¿Qué tan independiente es la FED?

Desde que la FED abrió la puerta de intervenciones monetarias a gran escala, como los denominados Quantitative Easing, los mercados financieros esperan más. Esto se ha convertido en una especie de vicio en que lo que justifica un alza en el precio de los activos vienen dado por la posibilidad de inyecciones de liquidez de la Reserva. El problema es que como cualquier vicio, si llega a faltar, causa muchos problemas. Los mercados financieros están casi convencidos de que debe haber una nueva ronda de flexibilización monetaria y de que la FED la anunciará tarde o temprano, además de que también anunciará que extiende su baja tasa de interés por un período más prolongado. Qué pasaría en el mercado financiero global si no lo hace?

Como en la actualidad la Reserva no se puede dar el lujo de desconocer las razones del mercado y, más aún, no va a permitir una caída en el valor de unos activos financieros, que pueda reavivar el fuego de la crisis y la incertidumbre; probablemente termine anunciando la extensión del período de bajas tasas y un estímulo monetario adicional, una antes que otra, pero que lo haga en alguna parte del año. Es esta la independencia que reclaman los libros de texto?

Es claro que esto puede generar un debate sobre la independencia del banco central, pero el punto de fondo acá tiene que ver con las verdaderas razones que se está actuando. Hasta el momento, la política expansiva de la Reserva Federal ha permitido impulsar levemente la economía y mantener a flote a los activos de inversión. Es cierto que Bernanke ha sido un estudioso de las crisis financieras y que uno de sus argumentos más fuertes tiene que ver con evitar una sequía de liquidez, que es lo que realmente termina desajustando todas las variables. Pero las preguntas relevantes son: no es la liquidez actual suficiente para evitar la cesación de pagos global? Se justifica una nueva expansión monetaria, simplemente porque hemos visto alguna desaceleración en los indicadores económicos?

Pero la pregunta más relevante de todas sería: cuáles son los niveles de actividad económica que consideran la FED y los mercados como los valores justos para permitir que ya no se piense en una expansión monetaria a mayor escala? En este punto pareciera que la crisis desatada en 2008 ha cambiado nuestra percepción de los niveles de tasa de interés que son necesarios para solucionar los inconvenientes económicos. En el mundo desarrollado ya no son sólo pequeños movimientos, sino que se necesita una escala gigante para proveer pequeños brotes en la economía global.