¿Qué opinan los gestores sobre la prohibición de las posiciones cortas en la bolsa española?

senal
pink_chicle, Flickr, Creative Commons

Desde ayer mismo y en los próximos tres meses estarán prohibidas las posiciones cortas sobre todos los valores españoles. En general, los gestores nacionales consideran que es una medida que había que tomar, si bien, dudan de su eficacia a medio plazo. Destacan como factores positivos la reducción de la volatilidad y la limitación de las caídas a corto plazo, aunque alguno advierte de que es la primera medida de control al movimiento de capitales españoles, ya que la medida no dice nada de los extranjeros.

“Ojalá la caída en la bolsa española se debiera sólo a los cortos. El porcentaje del free float que está corto en España es significativo en muy pocos valores y cuesta pensar que los vendedores en corto sean los responsables de las caídas de los últimos meses”, apunta Álvaro Martínez, de Cartesio. “Me temo que simple y llanamente los inversores están vendiendo y además parece que el precio al que lo hacen les importa poco o incluso les espolea a vender más, lo cual no deja de ser un dato interesante, por ver algo positivo en el mercado”.

Ya el verano pasado, el supervisor prohibió las posiciones cortas, en esa ocasión sobre las acciones de bancos y, según Martínez, esas medidas no surtieron los efectos esperados. “El que lo hayan anunciado sobre todo el mercado y no sólo el sector financiero aumenta la sensación de alarma. Desde luego, si el mercado sube será por otros motivos pero no por el hecho de que se prohíban las posiciones a corto, que, además, en ciertos momentos, impulsan más las cotizaciones al alza cuando hay cambios de tendencia”, apunta.

Javier Galán, responsable de Renta Variable Española de Renta 4 Gestión, considera que la medida no debería tener mayor repercusión en mercado, ya que no se ha obligado a cerrar las posiciones cortas ya existentes. La prohibición sólo se refiere a nuevas inversiones que supongan crear una posición corta neta o aumentar una preexistente, aunque sea intradía. “El volumen negociado sin ninguna duda va a verse afectado en torno al 15% o 20% del volumen negociado en Bolsas y Mercados, de un mercado ya de por sí con unos volúmenes muy bajos”, apunta Galán. “Es una medida intervencionista y creo que no suele tener mucho efecto en el mercado, pero ayudará a bajar la volatilidad de las empresas españolas. También puede ser una medida que anticipe que se avecinan más en los próximos días de otra índole”.

Restricción al uso de derivados

Antonio Hormigos, director de Inversiones de Mirabaud, coincide en que la medida puede tener efectos temporales positivos, ya que restringe el uso de derivados a la cobertura de carteras de valores en contado o a la apertura de posiciones largas, pero “sólo sirve para evitar a corto plazo la especulación contra el Ibex y no genera confianza”, explica. Por otro lado, comenta que el mercado de deuda sigue al margen de esta prohibición, por lo que el diferencial de tipos de interés puede seguir ampliándose teniendo en cuenta la ausencia de compradores para la deuda española.

También Xavi Cebrián, gestor de fondos de GVC Gaesco Gestión, cree que la decisión pondrá coto a la alta volatilidad que ha vivido el mercado últimamente. “Lo vemos como una medida positiva y creemos que se debería haber tomado antes, porque el mercado lleva tiempo movido por especuladores, mientras que el ahorrador final estaba totalmente fuera de mercado”, dice. “Además, esta medida ayudará a rebajar la volatilidad extrema que vivimos últimamente”.

Algo con lo que está de acuerdo Quim Abril, gestor de renta variable española de BMN Gestión, que entiende que se habrá tomado a falta de otra opción. “En todo caso, es verdad que se limita el potencial bajista de estas entidades durante el plazo de vigencia de la norma”, matiza, indicando que la entidad no opera con posiciones cortas y la norma no afectará a su operativa.

Cebrián apunta que, si bien es cierto que las ventas a corto tienen otras funciones más allá que la pura especulativa, “últimamente era pura especulación lo que se estaba haciendo en la bolsa española”. “Va acorde con las medidas políticas y de austeridad que se han tomado porque si el mercado no reconoce temas como la subida del IVA o los fuertes recortes anunciados, entonces no sirven de mucho”, dice. En todo caso, cree que será una medida temporal hasta que se solucione la fuerte presión sobre el mercado.

Para Gonzalo Lardiés, de Banco Madrid Gestión de Activos, “este tipo de medidas no suelen ser muy trascendentales en el tiempo”. Normalmente, el mercado sigue con la dirección que tenía antes de la prohibición al cabo de no demasiado tiempo. Sin embargo, como el mercado últimamente no hay quien lo entienda, ya no se puede predecir nada”, apunta.

El responsable de gestión de una entidad española que no quiere ser identificado asegura que la decisión de ayer es  “comprensible, ya que el Gobierno o sus organismos deben tomar las decisiones que estén en su mano para tratar de estabilizar la situación en lo posible” y considera que lo que provocará será un traslado de volúmenes a otros derivados sobre índices que permitan posiciones cortas para las coberturas, como el Eurex.

Para Hormigos, la decisión es “una primera medida de control de movimientos de capitales que afecta sobre todo a inversores españoles (particulares o institucionales) que están sometidos a supervisión de la CNMV. Es preciso saber cómo afecta esta medida a inversores extranjeros, sobre los que la prohibición no hace mención expresa”, añade.