Pros y contras de invertir ahora mismo en MBS

Reloj
Freestocks, Unsplash

En un entorno de mercados inciertos, sobre todo en renta fija, y de crisis geopolíticas, los inversores tratan de eliminar algunos riesgos en sus carteras y buscan clases de activo que les permitan conseguirlo. Una de esas clases de activo son los bonos de titulización hipotecaria de agencia (MBS), los cuales representan una oportunidad no exenta de riesgos. J.P.Morgan Asset Management los ha analizado desde una triple vertiente: por fundamentales, por valoraciones y por factores técnicos. Comenzando por los primeros, en la gestora americana consideran que los fundamentales del mercado de la vivienda han sido sólidos.

“El precio de los inmuebles se ha apreciado de forma sustancial desde la crisis y los inventarios de viviendas se sitúan cerca de mínimos históricos. La solidez del contexto económico y las asociadas subidas en los tipos de interés dan lugar a una moderación del riesgo de amortización anticipada, característico de este sector. Los MBS son normalmente vulnerables a las amortizaciones anticipadas: si los prestatarios optan por refinanciar sus hipotecas a tipos de interés más bajos, el capital se devuelve antes de lo esperado, lo que obliga a los inversores a reinvertir a tipos menores. Sin embargo, con crecimiento sólido, desempleo bajo e inflación en el objetivo, actualmente prevemos que los tipos de interés mantendrán una tendencia alcista gradual, conteniendo los niveles de amortizaciones anticipadas”.

En lo que respecta a las valoraciones cuantitativas, en la firma creen que los MBS ofrecen un potencial alcista atractivo considerando el nivel de riesgo asociado. “Un bono de titulización hipotecaria pass-through a 30 años de Fannie Mae —valor que cuenta con el respaldo implícito del gobierno federal de EE.UU.— se negocia actualmente con un diferencial ajustado por opciones de unos 30 puntos básicos con respecto a los bonos del Tesoro estadounidense. Además, los niveles actuales del diferencial se encuentran hacia el extremo más amplio del rango de dos años, lo que sugiere cierto valor”, explican.

En este sentido, en la gestora consideran que el bajo riesgo de default de los bonos de titulización hipotecaria de agencia se puede comprar con el de los bonos del Tesoro estadounidense. “De hecho, las correlaciones son relativamente altas”, afirman. Lo mismo ocurre con las rentabilidades totales, las cuales también son comparables. “Aunque las rentabilidades con respecto a los bonos del Tesoro estadounidense han sido ligeramente negativas en lo que va de año, el sector se ha visto menos afectado de lo que hubiéramos previsto debido a la reducción de las compras por parte de la Reserva Federal”.

Esto es importante ya que, esta minoración de las compras, a medida que la Reserva Federal reduce su balance, es el principal riesgo para el sector. “Hace dos años, la Reserva Federal reinvertía hasta 44.000 millones de dólares al mes en MBS pero, a medida que ha reducido su programa de expansión cuantitativa, este nivel ha descendido. A partir de este mes, las amortizaciones del capital principal solo se reinvertirán en la medida en que sean superiores a 20.000 millones al mes, lo que significa que hasta 20.000 millones al mes saldrán del balance, frente a los 16.000 millones al mes de los últimos tres meses y los 4.000 millones de al mes al comienzo del proceso de normalización en junio de 2017”, recuerdan desde J.P.Morgan AM.

Sin embargo, el aumento resultante de la oferta neta se ha compensado hasta ahora con una mayor demanda para el sector. “Los flujos en lo que llevamos de año de inversores extranjeros y gestores de capitales han superado las expectativas, pues los inversores se han alejado de los sectores de renta fija ante el aumento de la volatilidad en el mercado, el deterioro de los fundamentales de la deuda corporativa con grado de inversión y los riesgos idiosincráticos en la esfera emergente”, indican desde la casa americana.

Con todo esto, en J.P.Morgan AM concluyen que los MBS siguen siendo atractivos a corto plazo como fuente de diversificación dentro de una asignación a renta fija básica. “El respaldo implícito del gobierno de Estados Unidos a los bonos de titulización hipotecaria de agencia y una menor volatilidad con respecto a otras partes del mercado puede ser bien acogida ante el aumento de la incertidumbre geopolítica, si bien siguen siendo vulnerables a la reducción del balance de la Reserva Federal, así como a la volatilidad de los tipos que pueda derivarse de cambios inesperados en el entorno macroeconómico”, reconocen. Son los pros y los contras, las oportunidades y los peligros, de invertir ahora mismo en MBS.