Pictet: 2011 es año de divergencia en deuda emergente

Eugene Choi, especialista del equipo de renta fija emergente de Pictet AM, considera que 2011 es hasta el momento un año muy interesante. Reproducimos su análisis de la situación actual de mercado y las apuestas principales del equipo:

 

Es el año de la divergencia entre países y la clave es acertar con éstos.  Así como 2010 fue año de elevada rentabilidad general, excepto en Hungría, este año la deuda de Hungría es la más destacada, con rentabilidad hasta mayo de diez por ciento en dólares.  En el extremo contrario Egipto muestra rentabilidad negativa -han ido subiendo los tipos de interés con los problemas políticos-. Colombia sigue a Hungría con rentabilidad de seis por ciento, mientras que Turquía dos por ciento.

Por otra parte entre divisas emergentes la fortaleza ha venido dada por la debilidad del dólar, aunque los fundamentales de estas divisas siguen sólidos y el potencial intacto.  Hasta el momento además del forint húngaro, destaca el rublo de Rusia -gracias a los precios del petróleo, lo que ahora está en cuestión-. En el otro extremo la lira turca y el rand sudafricano muestran rentabilidades negativas -no han llevado a cabo el ajuste de tipos de interés y se les ha penalizado.

Los flujos han vuelto a la deuda emergente

El comienzo de 2011 fue difícil, con mucha volatilidad. En los dos primeros meses hubo salidas de esta clase de activos, en un momento en el que el mercado se mostró negativo con acciones de países emergentes y deuda de alta rentabilidad.  Sin embargo los flujos han vuelto a deuda emergente. Aunque Abril también fue bastante difícil hemos tenido un mes muy bueno en mayo y está ocurriendo lo mismo en junio.  Es previsible que a finales de Junio nos encontremos por encima del índice de referencia y en tres años y desde lanzamiento bien situados entre uno y tres por ciento en exceso de rentabilidad. Además el ratio de información sigue elevado, cercano a uno y el error respecto al índice muy por debajo de seis por ciento máximo. 

La inflación por debajo de la media de diez años

Aunque la inflación en países sigue siendo una preocupación su nivel sigue por debajo de la media de los últimos diez años en la mayor parte de ellos.  Además el ajuste en China se está notando en crecimiento y la inflación está probablemente cerca de máximos.  También es probable que la subida de tipos entre en una pausa o se normalice en otros países de Asia.  Por otra parte la inflación ha sorprendido a la baja en Polonia y en México, aunque al alza en Hungría.

Mientras ha habido elevados incrementos de reservas de divisas -en Indonesia han crecido 45 por ciento en un año-, lo que puede implicar futuros intentos de mantener las divisas artificialmente altas. De hecho China ha sido muy criticada por sus métodos de intervención, aunque lo va a seguir haciendo.  Sin embargo la inflación en Indonesia ha llegado caer cuatro por ciento debido a que ha dejado flotar su divisa. Es posible que otros países reconozcan la validez de esta herramienta, incluso Brasil -que intervino su divisa a finales del año pasado-.

Somos más positivos en duración

Históricamente los tipos de interés y el cupón han sido el conductor principal de rentabilidad en deuda emergente. A finales de 2010 se esperaban subidas de tipos de interés y teníamos más posición en divisas que en sensibilidad a variaciones de tipos de interés –duración-. Incluso había inversores negativos en duración, lo que no ha sido nuestro caso, pues consideramos las bondades del elevado cupón.  Sin embargo durante este tiempo ha habido exceso de volatilidad entre divisas, lo que nos ha movido a ser más neutrales pero más positivos en duración.  Hay que tener en cuenta que ya ha habido gran número de subidas de tipos de interés desde finales de 2010, excepto en Turquía y Sudáfrica.  Turquía se ha embarcado en un experimento de política monetaria con combinación de subida de tipos de interés y elevación de ratios de reservas bancarias, que ha funcionado.  Sin embargo el mercado está empujando al país hacia una política más ortodoxa.

Actualmente apostamos al alza por deuda de Brasil –se ha comportado muy bien hasta el momento y aunque puede haber dos subidas de 25 puntos básicos adicionales la inflación tiende a estabilizarse-. También apostamos, de manera táctica, por deuda de México -tiene elevada correlación con EEUU, donde no es previsible haya subidas de tipos a corto plazo-. 

Entre divisas apostamos por el renminbi chino –aunque ello requiere grandes volúmenes para capturar exceso de rentabilidad dada la poca volatilidad- y en dólar de Hong Kong -sigue ligado al dólar de EEUU-. También apostamos por la rupia de Indonesia.

Aunque seguimos cautos respecto a crédito de países emergentes hemos incrementando ligeramente las posiciones hasta un peso de 3,5 por ciento.