Paulson afronta rentabilidades negativas en el año de hasta el 47%

El multimillonario inversor estadounidense John Paulson está viviendo uno de los peores años desde que fundó su firma de hedge funds, Paulson & Co. Si en la pasada crisis crediticia se hizo célebre por su pesimismo y una apuesta acertada contra las hipotecas basura y las acciones de bancos en EEUU que le hicieron ganar más de 20.000 millones de dólares, y en 2010 también sacó provecho de la evolución del oro, sus actuales especulaciones optimistas sobre un escenario de recuperación en el país le están pasando ahora factura.

 

Así, Paulson prevé una recuperación para finales de 2012 y ve los mercados de valores baratos en los niveles actuales, lo que explica su posición alcista en la bolsa a pesar de las recientes caídas. El multimillonario ha invertido en el sector financiero del país, donde los precios han caído fuertemente en las últimas semanas, algo a lo que se suman las pérdidas sufridas a principios de año ante su participación en Sino-Forest, una compañía maderera china envuelta en un escándalo de fraude. Y también las sufridas por las últimas caídas del oro, una de sus grandes apuestas desde el año pasado.

 

Esta situación explica que la mayoría de sus fondos registren rentabilidades negativas en lo que va de año. Hasta el punto de rozar el 47% en el caso de uno de sus mayores productos, el Paulson Advantage Plus, un fondo de arbitraje de eventos que tiene un apalancamiento de 1,5 veces y acusó una fuerte caída de doble dígito de septiembre, del 19,35%. En las clases de acciones en oro, las caídas se reducen al 32% y al 17,6% en el año y en el último mes, según los últimos datos sacados a la luz por Absolute Return Magazine.

 

Otro de sus grandes fondos, el Paulson Advantage, cae en el año el 32,4% y el septiembre, más del 12% y su versión en oro se deja cerca del 20%. Ambos fondos, con una estrategia de arbitraje sobre eventos, son los dos mayores productos de la gestora, gracias a que en los últimos años han atraído a un gran número de inversores institucionales como fondos de pensiones. Así, la firma contaba a principios de 2011 con activos cercanos a los 38.000 millones de dólares, pero ahora esa cifra se sitúa en torno a 30.000 millones, debido tanto a la pérdida de rentabilidad como a las retiradas de capital según los datos publicados por Wall Street Journal Wall Street Journal.

 

Deadline: 31 de octubre

De hecho, los inversores deben decidir el próximo 31 de octubre si retirar capital de ambos productos a finales de este año ante la actual situación, o mantenerlo -a tenor de los buenos datos a largo plazo y de la posibilidad de recuperación, pues el año pasado, el Advantage Plus ganó el 18%-. Ante esta situación, el gurú intentará explicar lo ocurrido en una próxima conferencia telefónica con inversores.

 

Pero los números negativos no sólo afectan a los fondos de mayor tamaño. Y es que, si durante gran parte del año sus hedge funds han sufrido menos que otros gracias a sus apuestas en oro, esa situación cambió en septiembre, un mes negativo para el metal precioso y de caídas generalizadas en todos sus fondos, lo que le convierte en una de las firmas de hege funds con más pérdidas desde enero. La media de caídas en el sector de hedge funds es del 2,81% en el último mes y del 4,74% en lo que va de año según datos de Hedge Funds Research.

 

Por ejemplo, el Paulson Credit Opportunities se dejó casi el 12% en el último mes, dejando las caídas anuales por encima del 18%, mientras el Paulson Recovery Fund –que debería beneficiarse de la mejora en la economía estadounidense- perdió el 14% -y el 31,3% en lo que va de año-. Incluso el Paulson Gold se dejó más del 16% en el último mes, dejando las ganancias anuales en un leve 1,34%. Las cifras en este último producto son peores que las del mercado del oro físico, que sube el 16% desde enero, pues el fondo invierte en acciones de compañías mineras, que no se han movido de forma acompasada con el metal precioso.

 

Según Forbes, la riqueza neta de Paulson asciende a 15.500 millones de dólares, parte de la cual está invertida en su compañía, de la que controla junto con otros altos cargos más de la mitad de sus activos. Paulson ya había advertido en primavera de los riesgos y la fuerte volatilidad de los mercados.