Paul Casson: “China podría ser la próxima burbuja"

Kamil Molendys, Unsplash

Como gestor del fondo Henderson Horizon Pan European Alpha, un producto long-short de renta variable europea, Paul Casson ha de buscar compañías caras y dañadas para generar alfa en el lado corto de su cartera. En este sentido está atento a la creación de posibles burbujas y, entre las perspectivas de futuro, vigila China con atención. “Igual que se podría haber sacado partido de las posiciones cortas en el sector tecnológico en 2002 o en las financieras en 2008, ahora pensamos que China podría ser la próxima burbuja”, asegura.

Con respecto al mercado griego, descarta el riesgo de default por el apoyo de Alemania y Francia, y en lo que se refiere al español, considera que hay oportunidades interesantes. “Donde hay problemas, siempre hay oportunidades y, aunque los mercados no van a subir un 35% este año, apostamos por ciertas compañías como las telecos, y en el mercado español, Telefónica, si bien también nos gusta Inditex”, afirma el gestor, convencido de que éste es el año de la recuperación en los beneficios de las compañías, frente a un 2009 en el que predominaron los recortes en el gasto.

El fondo de Casson busca, sin ser un hedge fund, obtener un retorno absoluto del 10%-12% en periodos de tres años independientemente de las condiciones de mercado, preservando capital en momentos difíciles y aprovechando la recuperación en periodos de tiempo muy cercanos, gracias a la flexibilidad del formato UCITS. Denominado en euros y con 150 millones bajo gestión, aprovecha al máximo las ventajas de este paraguas, aplicando un enfoque de hedge fund para generar alfa adicional, tanto con posiciones largas como con cortas, a través de CDS. Sus principales posiciones se centran ahora en el sector de telecomunicaciones (12,7%), sanitario (11,6%) y financiero (11,3%).

“Damos la bienvenida a la volatilidad que está creando la situación en Grecia y que se podría extender a países como Portugal, España y al final, Reino Unido”, afirma, si bien el riesgo obtenido en sus cuatro años de track record (del 15%) ha sido menor al de su benchmarck, el MSCI Europe Index (23,8%).

Con un análisis bottom-up, selecciona entre 40 y 60 compañías, que ahora son 56 debido a las “buenas ideas que pueden encontrarse en el mercado”. Las posiciones suelen dividirse entre 30 largas y 20 cortas, pues el fondo tiene en conjunto un rango de exposición neta de entre el 0 y el 150% (esta última se daría en periodos en los que sean muy optimistas con respecto a la bolsa), es decir, no puede tener una posición corta.

Para seleccionar las compañías en la parte larga de la cartera, el gestor busca firmas con valoraciones atractivas y un crecimiento sostenible de sus flujos de caja, mientras que para seleccionar las cortas recurre a algún hecho negativo, como un esperado profit warning o una alta deuda, reconociendo que estas últimas posiciones tienen más riesgo. “Ahora nuestras perspectivas son lo suficientemente mixtas como para permitirnos ver oportunidades en ambos sentidos, pero como nuestro sesgo largo es del 75% en la actualidad, esperamos que la recuperación continúe”, afirma Casson.