Paramés envía su tercera carta a inversores en 15 días

Francisco_Garcia_Parames-1
Francisco García Paramés, imagen cedida

De cartas trimestrales, a tres cartas en 15 días. La crisis del coronavirus ha traído un cambio en la comunicación de Cobas AM, que intensifica sus cartas a inversores. “Continuamos con el ejercicio de mayor comunicación comenzado la semana pasada y actualizamos el impacto de la crisis en nuestras carteras y en Cobas Asset Management en general”, empieza la carta.

La gestora señala que siguen operando sin novedades. “Durante la semana se han realizado 1.335 operaciones con clientes, siendo 1.157, un 87%, operaciones de suscripción o traspaso de entrada”, destaca. En su carta anterior, resaltaba que durante el mes de marzo acumulaban 5 millones de euros de captaciones. 

En el fondo Cobas Internacional, después de haberse comunicado con varias compañías, los contactos confirman sus estimaciones de la semana pasada. “Únicamente un 20% de la cartera verá afectadas significativamente sus ventas en los próximos meses”, apuntan. Confirman el impacto en los fabricantes de automóviles y en los retailers.

Para Francisco García Paramés, la clave del sector automóvil es que las compañías tengan liquidez suficiente para soportar unos meses con ventas muy bajas, elemento que cumple Renault, según el gestor. Respecto a otras posiciones importantes, destaca que su principal retailer en cartera (Dixons) ha indicado que hasta ahora “apenas habían tenido impacto en las ventas, pero es lógico pensar que lo acabarán teniendo”. En Aryzta, otra de las posiciones relevantes, piensan que el impacto puede ser mayor del moderado que indicaban inicialmente por el cierre de restaurantes, hoteles, etc, “No parece que puedan ser compensados por el incremento de ventas en supermercado”, señala.

En la cartera ibérica, confirma que el mayor impacto lo tendrán en las compañías inmobiliarias (9%) y en Meliá (4%). “Las ventas inmobiliarias se podrán recuperar (ya está ocurriendo en marzo en China), pero Meliá no recuperará las habitaciones no ocupadas estos días”, contextualiza. De la hotelera apunta que “la compañía está tomando medidas drásticas, como reducciones del sueldo del 50% y afronta la situación con una deuda reducida: la valoración de sus hoteles es de +3.5bn de euros y solo tiene hipotecas por valor de menos del 10% de sus activos”.

Por otro lado, aunque su exposición es pequeña al sector de automóviles, subraya compañías del sector como CIE y Gestamp que se están viendo afectadas. Además, han reducido su exposición al sector financiero durante estos días ya que ven “demasiadas incógnitas para un sector que trabaja estructuralmente con alto grado de endeudamiento”. El último sector afectado de la cartera es el de los medios de comunicación, por la caída de la publicidad. “Este impacto es real, pero está claro que el valor del contenido de los medios se ve realzado durante esta época de crisis, con la expectativa de que ello suponga un fortalecimiento de los modelos de negocio a largo plazo”, reflexiona.

En resumen, indica que un 20% de las compañías de la cartera internacional y un 30% de la cartera ibérica están viendo afectadas seriamente sus ventas por la crisis. El resto, están sufriendo un impacto pequeño o nulo, tal y como explica Paramés.

En su anterior carta, recordaba que "desde 1980, año en que China empezó su gran desarrollo económico no ha habido ningún año de recesión global (medida en términos de paridad en el poder adquisitivo)". En este sentido, quiso reslata que el último año de crecimiento inferior al 2% fue 2009 y la dificultad de entrar en recesión global. "No sabemos si 2020 será la primera vez, pero la aparente normalización que se va dando en China nos hace ser razonablemente optimistas", afirmaba.

El gestor quiso insistir que el valor de sus inversiones o negocios no depende de que su vecino o socio venda una participación a un precio cualquiera. "Puede hacerlo por necesidad, por ignorancia, por pánico, por compras/ventas automáticas realizadas por máquinas o porque en el mercado bursátil la mitad de la inversión se realiza en fondos pasivos, sin pensar", determinaba. "Esto no afecta nuestras valoraciones, que únicamente y siempre dependen de la capacidad de generar beneficios del negocio o la empresa", comentaba.