Parece que 2013 comenzará con preocupaciones sobre la recuperación económica mundial. Y eso a pesar de que, según algunos expertos, en comparación con años anteriores, hay señales más esperanzadoras de cara al futuro que apuntan a que las serias amenazas para la estabilidad de las economías y los mercados se han disipado o pueden hacerlo. “Quizás no lo parezca a primera vista, pero la opinión sobre la supervivencia del euro ha cambiado radicalmente para mejor. A esto hay que añadir que existen renovadas expectativas de que EE. UU. pueda evitar el abismo fiscal y el hecho de que los emergentes tienen ahora la experiencia sobre cómo hacer frente a la ralentización de sus economías”, afirma José Zárate, analista de ETF de Morningstar. Sin embargo, el experto reconoce que las estadísticas económicas a corto y medio plazo continuarán siendo decepcionantes, por lo que lo más probable es que los inversores sigan tendiendo a tener una visión pesimista, informa Expansión.
En la práctica, esto se traduce en la indecisión de los inversores respecto a qué estrategia adoptar de cara al próximo año. La mayoría de los que optan por invertir en bolsa, prefieren hacerlo siguiendo una estrategia defensiva. ¿Es esto posible? Para Juan San Pío, responsable de Ventas Institucionales de Lyxor ETF en Iberia y América Latina, existen tres alternativas con ETF.
La primera sería apostar por una estrategia de mínima volatilidad. Según explica, en la actualidad existen varias metodologías alternativas de indexación que buscan unos criterios de ponderación de valores distintos a los de capitalización bursátil, llamadas ‘smart beta’. La metodología Lyxor Equal Risk Contribution (ERC), por ejemplo, busca evitar la concentración de riesgos en un número limitado de los componentes de un índice, buscando así mejorar los resultados de los índices de capitalización en términos de diversificación, rendimiento y volatilidad, manteniendo todo el universo de referencia original de los propios índices al constituirse.
“En términos de rentabilidad y volatilidad, esta estrategia supera a los tradicionales índices en el medio y largo plazo”, asegura. Algunos ETF que hacen esta réplica son el Lyxor Risk Weighted y el Lyxor ETF Smartix Euro iStoxx 50 Equal Risk. Otras firmas, como iShares, tienen previsto registrar de forma inminente en España el iShares MSCI Europe Minimum Volatility, el iShares MSCI World Minimum Volatility, el iShares MSCI Emerging Markets Minimum Volatility y el iShares S&P 500 Minimum Volatility.
La segunda estrategia pasaría por invertir en ETF de índices sectoriales defensivos. Se puede tomar posición en aquellos sectores tradicionalmente mas defensivos o con menor volatilidad, como por ejemplo el de consumo a través del Lyxor ETF Stoxx Europe 600 Food & Beverage. Por su parte, iShares acaba de traer a España una amplia gama de ETF sectoriales europeos que permiten al inversor elegir el sector que mejor encaje con sus intereses.
La tercera opción sería seleccionar acciones de gran calidad a nivel mundial, con capacidad de generar dividendo y que presenten unos retornos históricos superiores a otras compañías de su mismo sector. Este tipo de compañías presentan un menor riesgo en términos de volatilidad. La gestora francesa apuesta por el ETF SG Global Equity Quality Income, fondo que invierte en compañías globales con solidez en los dividendos y una generación de ingresos consistentes.
Deutsche Bank, por su parte, tiene varios ETF de dividendos registrados en España como el db x-trackers Stoxx Global Select Dividend 100 ETF, que selecciona las 100 compañías con la rentabilidad por dividendo más alta dentro del Stoxx 600 y el Euro Stoxx Select Dividend 30 ETF, que hace lo propio eligiendo las 30 compañías del Eurostoxx 50. Asimismo, la firma alemana ha registrado dos ETF que seleccionan compañías que no solo están pagando un alto dividendo, sino que además tengan un fuerte flujo de caja que permita obtener dividendos sostenibles en el futuro. Son el db Platinum CROCI Global Dvd Fund y el db Platinum CROCI US Dvd Fund.
