Mobius: Razones de mucho peso por las que apostar por los mercados emergentes

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Funds People

Las principales economías emergentes han registrado en el primer semestre del año un crecimiento económico más débil de lo previsto. Algunos inversores sugieren que esta desaceleración es de naturaleza cíclica. No obstante, la pregunta está en el aire. ¿Hasta qué punto se debe temer una fuerte contracción del crecimiento económico de los emergentes? Según Mark Mobius, presidente de Templeton Emerging Markets, “es probable que los emergentes, en general, y los BRIC, en particular, sigan creciendo durante los próximos años a un ritmo muy fuerte”.

En un artículo publicado por el gurú, recuerda en primer lugar que los BRIC no son la totalidad de los mercados emergentes. Dentro de esta categoría se encuentran un grupo de países como Indonesia, Vietnam, Egipto, Turquía, Nigeria y Sudáfrica que reúnen una serie de características, como mano de obra barata y abundancia de recursos naturales, que favorecerá un crecimiento económico rápido. “Estas economías no sólo podrán ayudar a compensar cualquier déficit de crecimiento de los BRIC, sino que mediante el suministro de recursos y su demanda podrán ayudar a aislar a los grandes mercados emergentes del esclerótico crecimiento y la desaceleración de la demanda de los desarrollados”.

China

Mobius no se muestra en absoluto preocupado por la desaceleración económica que están experimentando países como China. Es más, en el caso de esta economía, el experto considera que “un menor ritmo de crecimiento de su PIB es algo casi inevitable”. En este sentido, frente a la tasa de avance media del 10% alcanzada durante los últimos años, “las previsiones que apuntan a un avance anual de entre el 7% y el 8% nos parecen totalmente racionales", indica. Por lo pronto, “estas tasas seguirían estando muy por encima del crecimiento esperado en las economías desarrolladas”, recuerda el experto.

El gestor de Franklin Templeton considera un factor importante el hecho de que el Gobierno chino haya decidido ponerse al frente del cambio económico que requiere el país, que pasaría de un modelo de crecimiento basado en las exportaciones a uno sustentado por una mayor demanda interna. “El endeudamiento de los consumidores, incluida la deuda hipotecaria, permanece en niveles muy bajos y, fuera del sector de gama alta de vivienda en las grandes ciudades, no ha habido un exceso de oferta que presione a los precios”. Por ello, Mobius no ve ninguna razón por la que China no pueda convertirse en una economía avanzada.

India

A diferencia de China, donde la población en edad de trabajar ha alcanzado su pico, en India la fuerza laboral continuará creciendo con fuerza durante la próxima década. Sin embargo, existe un problema. El Gobierno indio ha tenido dificultades para llevar a cabo los proyectos de infraestructuras necesarios. Además, ha crecido la preocupación entre los inversores por una serie de iniciativas populistas aprobadas por el Ejecutivo en los últimos meses. “En nuestra opinión, estos impedimentos son fácilmente superables si existe la voluntad política para ello, lo cual nos lleva a creer firmemente en el potencial de crecimiento de su economía una vez estos obstáculos hayan sido resueltos”.

Rusia

En Rusia, al igual que en China, Mobius cree que es probable que veamos caídas en la población en edad de trabajar. No obstante, también es muy posible que la clase media rusa se dispare al filtrarse a través de la economía la importante industria de exportación de productos básicos del país. “Esto se podría traducir en un crecimiento muy importante de las empresas proveedoras de bienes y servicios de consumo en este mercado en expansión. A todo ello hay que sumar la adhesión del país a la OMC, lo que podría proporcionarle apoyo para experimentar un crecimiento como el mostrado por China a partir de 2001".

Brasil

En lo que respecta a Brasil, su crecimiento ha estado por debajo del mostrado por China, India o Rusia. “Una tradición gubernamental populista e intervencionista, unida a unas políticas nacionalistas en algunas industrias clave, como la de la energía, ha tendido a retardar y complicar la inversión”. Por ese motivo, el Gobierno carioca ha estado tomando medidas para tratar de eliminar esos obstáculos al crecimiento, concretamente en lo que se refiere a la contención de los costes de las pensiones de los empleados públicos y un mayor interés por la privatización. “Mientras tanto, el consumo interno seguirá tirando con fuerza, gracias a una población joven y dinámica que favorece una diversificación gradual de su economía”, indica.