Miguel Forteza, de Citi Banca Privada: "No hay que tener prisa por invertir”

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Imagen cedida

En el mercado actual existen dos fuerzas contrapuestas que ejercen presión. En primer lugar, un crecimiento mundial en clara desaceleración, con una Europa en recesión, bajas cifras de PIB en EEUU y un mundo emergente que ha frenado el ritmo. Y, al otro lado, unos bancos centrales que tratan de actuar como contrapeso a las negativas noticias macroeconómicas.

Ante la fuerza de las últimas medidas tomadas por estos últimos, como la tercera ronda de relajación monetaria en EEUU o el apoyo del BCE a los países con problemas, en Citi Banca Privada creen que la situación estará equilibrada a corto plazo, en un periodo de hasta tres meses, lo que podría llevar a los inversores a asumir mayor riesgo y a ver conatos de recuperación en los mercados. Pero a medio y largo plazo, Miguel Forteza, asesor de inversiones de la entidad, considera que las complicaciones en Europa volverán a manifestarse, ya sea de la mano de Grecia u otros mercados periféricos, que desencadenarán una nueva reacción de aversión al riesgo.

“Las probabilidades de salida de Grecia del euro son altísimas”, afirma, de en torno al 90%. Sin embargo, cree que la posibilidad de que un potencial abandono del país heleno desencadene un efecto dominó es prácticamente nula, aunque reconoce que sí está sobre la mesa. Mucha más visibilidad hay sobre los rescates a países como España, donde sus necesidades de capital dependerán en gran parte del crecimiento, que estima en una cifra negativa de en torno al 2% o 3% para 2013.

Para mejorar la situación económica y de sobreendeudamiento, cita al gurú de Pimco Bill Gross y menciona la existencia de tres vías: el crecimiento, la inflación y la reestructuración, asegurando que la solución podría pasar por una mezcla de las tres. “En EEUU la crisis es económica pero en Europa es dual, económica y política”, afirma.

Apuesta por EEUU
Por eso, donde los estrategias de Citi son más positivos es en el gigante americano, donde consideran que el resultado electoral no marcará una gran diferencia (aunque dan más probabilidades a la victoria de Obama) y que se llegará a una solución híbrida sobre el problema fiscal, en un ejercicio de decisión extrema y apurada como sucedió con el acuerdo sobre el techo de deuda. “EEUU tiene una gran oportunidad histórica de retomar el liderazgo del crecimiento mundial”, explica Forteza, mencionando el suelo que ya ha tocado el sector inmobiliario, el desarrollo tecnológico en el país, la competitividad de su industria manufacturera, la existencia de una pirámide poblacional favorable y, sobre todo, una independencia energética que supondrá un cambio económico estructural.

Por ello, aunque en sus carteras infrapondera la renta variable de todas las regiones, su mercado favorito es EEUU. En otros mercados como el europeo, y aunque ha añadido alguna posición por las atractivas valoraciones de sus acciones, la infraponderación es fuerte. “No hay duda de que la bolsa está barata pero la cuestión es si puede bajar más o cuánto tiempo puede seguir estando barata”, advierte.

Su posición en renta fija es más positiva: aunque infrapondera la deuda pública periférica y es neutral sobre la de los países core, sobrepondera los bonos corporativos con grado de inversión, si bien advierte de que el potencial podría llegar a su fin. “El limón ya está exprimido pero no consideramos que haya riesgo de desplome porque no hay alternativa”. Ante la dificultad de gestionar en un entorno de cada vez menor calidad, aconseja cautela, y posicionarse en liquidez a la espera de mejores oportunidades. “No hay que tener prisa por invertir. Los mercados están presionando para asumir riesgo –en la medida que el no riesgo no paga nada- pero hay que tener la mente fría y esperar la oportunidad adecuada. Te la puedes jugar pero los clientes prefieren saber dónde va el tren que toman, prefieren la seguridad”, asegura.

En divisas, la visión de Citi Banca Privada es que el euro sea sostenido a corto plazo por las políticas del BCE pero a medio plazo cree que se producirá un escenario de fortaleza del dólar frente a todas las demás, incluidas las emergentes, ante la desaceleración en dichas regiones. Por ello mantiene un alto porcentaje de exposición al dólar en las carteras. Como medida de diversificación y protección ante un entorno de inflación, también recomienda tener una pequeña parte en activos tangibles como el oro, “una de las mejores inversiones de la última década”, aunque aún no se atreve con el sector inmobiliario español, si bien cree que empieza a haber oportunidades en EEUU y en otros países europeos.