Materias primas y recursos naturales: diversifique su cartera

En Carmignac Gestion opinamos que los próximos 5 a 10 años serán testigo de un crecimiento en el sector de las materias primas del todo único, acompañado, eso sí, por el importante respaldo que supondrá la coronación de China como el país con mayor crecimiento del mundo. En el pasado, China representaba entre el 25 y el 30% de la demanda mundial, sin embargo, debido a la debilidad actual de las economías desarrolladas, esta proporción ha aumentado hasta un 40%, llegando incluso a superarse esta cifra en algunos productos específicos. Este fenómeno, amplificado por la aceleración del crecimiento general del mundo emergente, trae consigo dos consecuencias claras; primero, un impacto mayor de lo esperado en la demanda a corto y medio plazo, y segundo, un mayor riesgo de sufrir escasez de determinadas materias primas a largo plazo. Es más, la tendencia de modernización de otros países, como Brasil o India, tendrá cada vez mayor repercusión en el crecimiento de esta demanda. Pero los atractivos de invertir en este sector no acaban aquí. Los ciclos de las materias primas tienden a ser más largos que los económicos, ofreciendo así mayor diversificación en una cartera de activos mixtos en diferentes períodos del ciclo económico. Siguiendo esta línea, una cartera de materias primas ofrece también protección a largo plazo contra la inflación y los períodos deflacionarios.

Ya entrados en la materia de invertir en estos productos, hacerlo directamente en empresas del sector siempre resulta más beneficioso que invertir en las materias primas subyacentes. Invertir en una empresa que cotiza en bolsa permite al inversor beneficiarse de un efecto doble: Con la elección correcta de acciones, la empresa no sólo se beneficiará de la subida de los precios de las materias primas, único beneficio de los futuros, sino también de un incremento de los volúmenes de producción, rentabilidad y efectivo en el mercado relevante.

Hablando de materias primas, los importantes cambios experimentados en 2009 por los mercados del mineral de hierro y el carbón de coque no han hecho más que aumentar nuestro interés en estos materiales. En este sentido, China ha pasado de ser exportador de carbón de coque a importador neto, mientras que el aumento de su dependencia de las importaciones extranjeras de mineral de hierro ha encarecido este material en más de un 40% en el primer trimestre de 2010. Este giro brinda a los productores una fuerte posición de negociación, con acuerdos iniciales firmados para el segundo trimestre que sugieren un incremento del precio de alrededor del 90% anual. Sobre el resto de materias primas, creemos que el precio del petróleo aumentará como consecuencia del incremento en la demanda de energía que supondrá la recuperación estadounidense y la creciente demanda de los mercados emergentes. Y, ya por último, estimamos que las empresas auríferas continuarán beneficiándose de la subida del siempre preciado oro, que se utilizará como activo financiero ante la inestabilidad del euro y la exposición al riesgo soberano.