Luke Greenwood (Invesco): “La volatilidad es lo único que genera oportunidades para conseguir rentabilidad en renta fija”

Luke Greenwood (Invesco)
Funds People

La renta fija lleva acumulando años de auténtico rally gracias a las acciones acomodaticias (tipos al 0% y programas de compras de deuda) que han llevado a cabo los bancos centrales. Pero el hecho de que esas municiones empiecen a agotarse complican la inversión en un tipo de activos que se han movido al son de las políticas monetarias y que hoy presentan una alta tasa de cupones con rentabilidad negativa.

“Invertir ahora en renta fija es un gran reto”, confirma Luke Greenwood, coresponsable de renta fija corporativa de Invesco.  Y más si el horizonte de inversión en cuestión es en plazos cortos  ya que obliga a ser mucho más activo que en el pasado para arañar rentabilidad a un mercado que cada vez da menos de sí. “Hoy en día la volatilidad es lo que genera oportunidades para conseguir rentabilidad en el mercado de renta fija. Hay que ser un poco más táctico a la hora de invertir”, asegura este experto que ha estado en Madrid presentando uno de los fondos que gestiona, Invesco Euro Shrot Term Bond, que cuenta con el Sello Funds People 2019 por sus clasificaciones de Blockbuster y Consistente.

De ahí que en un contexto en el que gran parte de la deuda gubernamental ofrece retornos negativos, opte masivamente por una cartera compuesta en un 50% por deuda corporativa, dividida casi a la mitad entre emisiones financieras y no financieras,  aunque diversificando mucho por tipo de emisor ya que, como explica el gestor no quieren que ningún nombre de la cartera tenga demasiado impacto en la misma, lo que ayuda a controlar el riesgo. En cuanto a la deuda gubernamental, sigue mostrando una predilección por los bonos italianos donde han aumentado el plazo de inversión de dos a cinco años tras la distensión que se ha visto en el país y, aunque siguen confiando en la deuda española y portuguesa, han reducido mínimamente su exposición debido, en el primer caso, al impacto que las tensiones políticas pueden tener en el mercado.

Además, este gestor tampoco parece dispuesto a asumir un excesivo riesgo crediticio ni de divisa como demuestra el hecho de que invierte apenas el 3,5% de la cartera en emisiones high yield y solo el 2,6% está en divisas diferentes al euro.

Al fin y al cabo, confía en que la política monetaria del BCE siga teniendo un efecto positivo en el mercado de renta fija europea, al menos en el corto plazo. “Seguimos viendo más opciones de recorte en la facilidad de depósitos hasta niveles del -0,70%. Más allá de la cifra, lo más importante que se vio en la última reunión del BCE fue que demostró que sigue estando ahí”, afirma, aunque se muestra escéptico con la idea de que dichas medidas, más allá del impacto que tengan en mercado a corto plazo, consigan el objetivo que persiguen, que no es otro que el de generar inflación.