Los temores en la eurozona y la cautela en emergentes echan a los gestores en brazos de EEUU

Kamil Molendys, Unsplash

Estados Unidos es el mercado que más se está beneficiando de las incertidumbres que sufre el mercado europeo a raíz de la crisis de deuda griega y de los países sureños, pues, según la encuesta mensual de Bank of America Merrill Lynch correspondiente al mes de mayo, los inversores se han refugiado en el mercado americano durante la semana en la que se negoció el rescate financiero al país heleno.

La encuesta, en la que participaron 202 gestores con activos de 530.000 millones de dólares desde el 7 al 13 de mayo, revela que el indicador de riesgo ha sufrido su mayor caída mensual desde 2003, lo que ha situado los niveles de liquidez en el 4,3%, desde el 3,5% que ocupaban en abril en los porfolios, a la vez que ha mermado el porcentaje de gestores que sobreponderan la renta variable desde el 52% hasta el 30%. Y es que el número de inversores que cree que la economía global se fortalecerá en los próximos 12 meses cayó desde el 61% al 42%, mientras la confianza en la mejora de los beneficios empresariales se redujo desde el 67% hasta el 47%.

Sin embargo, el sentimiento negativo con respecto a la eurozona (con el 30% de los encuestados infraponderando la región, el registro más bajo desde que se elabora la encuesta y frente al 13% de abril) y en el euro (el 46% espera que se deprecie, frente a la mitad de los gestores con esta expectativa el mes pasado) ha llevado a los inversores hacia EEUU, donde el porcentaje que sobrepondera su mercado bursátil ha subido en mayo, hasta el 22%. Y el 66% del panel cree que el dólar es la divisa que más se revalorizará entre las monedas de reserva.

El gap entre las perspectivas también es significativo a la hora de hablar de beneficios empresariales, pues mientras el 33% del panel cree que las mejores perspectivas son más favorables en EEUU, el 41% afirma que las peores son las de la eurozona, lo que supone una brecha de 74 puntos porcentuales, la mayor desde julio de 2003. De hecho, el número de inversores que espera ganancias de doble dígito al otro lado del Atlántico ha crecido desde el 50% al 54%.

“La encuesta refleja la huida hacia EEUU debido a la incertidumbre en Europa”, afirma Michael Hartnett, responsable de estrategia de renta variable global en BofA Merrill Lynch Global Research. “Los inversores han capitulado en Europa, batida por las preocupaciones sobre la deuda soberana y las pobres expectativas de crecimiento”, comenta Gary Baker, responsable de estrategia de bolsa europea de la entidad. De hecho, sólo el 23% de los encuestados esperan que la economía del continente se fortalezca este año, desde el 62% de hace sólo un mes. Los más confiados en la recuperación del panorama macro en el 2010 son los japoneses, con el 71%.

La merma de confianza en la economía global y en la eurozona también ha pasado factura en los mercados emergentes, donde el sentimiento positivo se ha visto reducido hasta su nivel más bajo desde principios de 2009. Así, el número de gestores sobrefraponderados en sus bolsas se situó en el 19%, frente al 31% del mes pasado. Además, el porcentaje de convencidos de que estas áreas ofrecen las mejores perspectivas para obtener beneficios empresariales cayó del 34% al 23%.

Y es que los gestores emergentes se posicionan con el mayor nivel de pesimismo con respecto al mercado chino desde febrero de 2009. Así, el 29% espera un debilitamiento económico en los próximos 12 meses, frente el 5% que predecía un fortalecimiento en abril.

El 90% retrasa las subidas de tipos hasta 2011

Debido a estas pobres expectativas de crecimiento, el 90% de los gestores europeos creen que el BCE no subirá los tipos este año, desde el 62% que lo consideraba el mes pasado. También en EEUU, sólo el 39% de los gestores cree que habrá subida por parte de la Reserva Federal en 2010, desde el 56% de abril, unas perspectivas que reflejan la caída en las perspectivas de aumento inflacionista, desde el 46% hasta el 35%.

Con respecto a los sectores, las preocupaciones económicas han llevado a una rotación hacia áreas más defensivas, saliendo de financieras y materiales básicos, si bien los tres mayores siguen siendo tecnología, energía e industriales, lo que sugiere que los cíclicos aún mantienen atractivo.