El creciente uso de los seguros unit-linked internacionales en el ámbito de la banca privada, como alternativa a las SICAVs y a las carteras discrecionales, se debe a la singularidad que ofrece este vehículo en la gestión de patrimonios. Puede resumirse en que se trata de seguros de ahorro-inversión que proporcionan al mismo tiempo las ventajas de vehículos más complejos o inexistentes en España, como las fundaciones y los trusts, pero sin su rigidez, y las ventajas de vehículos fiscalmente eficientes como las SICAVs sin sus inconvenientes.
Su tratamiento fiscal es análogo al de las instituciones de inversión colectiva: la tributación se difiere al momento del rescate del seguro y lo que se grava es la plusvalía como rendimiento del capital mobiliario (no como renta del trabajo). Ahora bien, cuando el tomador del seguro, es decir, el que aporta los fondos, es distinto del beneficiario, el seguro no está sujeto a tributación por IRPF sino exclusivamente por el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, ya sea por fallecimiento o transmisión inter vivos, lo que permite beneficiarse de la favorable fiscalidad de algunas Comunidades Autónomas.
Pero el verdadero atractivo del unit-linked internacional reside en que permite planificar la transmisión patrimonial en una fecha determinada (como donación) o al fallecimiento (como herencia), no importa lo compleja que sea, de manera análoga a los trusts pero de forma más simple y versátil. Al cliente final le gusta el seguro porque puede incorporar dentro del propio vehículo de inversión disposiciones para la transmisión de su patrimonio y cambiarlas cuando desee.
El seguro no forma parte de la herencia ni se tiene en cuenta para las particiones hereditarias. Esto permite designar, ampliar o modificar los beneficiarios sin que figuren en testamento o en distintas proporciones al resto de los bienes legados (deben respetarse las legítimas, pero sólo en el momento de constituir el seguro, por lo que la proporción puede variar posteriormente). Además, se permite establecer y modificar condiciones, términos o plazos para el abono de la prestación, tanto en vida del asegurado como a su fallecimiento, lo que ofrece múltiples posibilidades para satisfacer las necesidades sofisticadas de los patrimonios familiares. Y no menos importante, como el seguro es inembargable, la aseguradora pagará en efectivo a los beneficiarios al producirse el suceso, aún en contra de reclamaciones de acreedores o herederos y con independencia de que la herencia tarde años en liquidarse.
Gracias a estas ventajas del seguro, el inversor puede planificar la transmisión del patrimonio a sus hijos o herederos cuando cumplan una edad determinada, que puede modificar antes de que ocurra si cambia de opinión. Puede, por ejemplo, establecer que no se liquide hasta que sus hijos cumplan 18 años, porque no quiere que si fallece antes los fondos queden en manos de un tutor o incluso del otro cónyuge. Puede fijar una fecha para el abono con independencia de que fallezca antes porque espera que para entonces la fiscalidad de Sucesiones en su Comunidad Autónoma será menor. Puede establecer el pago en forma de renta para que sus hijos no reciban toda su fortuna de una vez. Puede, en suma, dejar atada la transmisión de su patrimonio en el tiempo y forma que desee, en la confianza de que la aseguradora actuará como un fiel trustee.
¿Por qué se hacen estos unit-linked con aseguradoras en Irlanda o Luxemburgo? En primer lugar porque en caso de quiebra de la compañía el patrimonio de los unit-linked no entra en la masa del concurso, eliminando así el riesgo de contrapartida de la aseguradora, y en segundo lugar por la mayor libertad de inversión que ofrecen estas legislaciones.
Por supuesto, el cliente elige el gestor y el custodio de su confianza y la estrategia de inversión, que puede materializarse en activos directos, pero también en fondos o SICAVs, así que el seguro no compite con los fondos, sino que canaliza la inversión hacia ellos.
En resumen, el seguro unit-linked internacional constituye un vehículo eficiente de inversión y planificación del patrimonio financiero idóneo para la gestión patrimonial familiar.