Los productos conservadores serán las estrellas del nuevo año

Desde Ahorro Corporación aseguran que la gran mayoría de los ahorradores seguirá buscando seguridad, lo que significa que, a su juicio, entre los fondos preferidos podrían estar los garantizados, sobre todo los vinculados a renta variable: “con sentido común estos productos deberían tirar del sector en 2010”. También apuestan por los fondos de renta fija mixta con sistemas de control de riesgo, como los VaR (Value at Risk). En estos instrumentos el inversor conoce de antemano el rango beneficio/pérdida esperados y en los buenos momentos pueden superar los resultados que proporcionan los activos de menos riesgo.De la misma opinión es la directora de Desarrollo de Negocio de Barclays Wealth, Carmen Lamo, que afirma que sin ninguna duda serán los garantizados los preferidos en 2010; y entre ellos, cree que los que tendrán más éxito serán los de renta variable. También apuesta por los mixtos adaptados a los diferentes perfiles de riesgo de cada cliente.Algo más osados tendrán que ser los que quieran sacar más partido a sus ahorros. El director de Ibercaja Gestión, Valero Penón, cree que con mayor razón que en 2009 “todo inversor que aspire a ciertos niveles de rentabilidad deberá asumir algo más de riesgo, y por ello la gestión alternativa dinámica (con objetivos de rentabilidad monetaria) y la adecuada y prudente diversificación entre renta fija y variable serán las alternativas”. A su juicio, los tipos de interés a corto plazo se van a consolidar en niveles bajos durante bastante tiempo y, aunque a final de año se produzca una subida, no será de calado por lo que fondos como los monetarios o los depósitos van a dar un rendimiento muy escueto. De hecho considera que aunque haya entidades que apuesten por ofrecer ‘extratipos’ por captar pasivo, en ningún caso habrá rendimientos de más del 4%, cifra que pueden superar sin problemas los fondos de retorno absoluto. Según Gonzalo Rengifo, director general de Pictet Funds en Iberia y Latam, en 2010 las rentabilidades de los depósitos pueden estar incluso por debajo del 2%, “un nivel en el que los inversores demandan alternativas que pueden encontrar claramente en los fondos”.El director de Ventas Institucionales de SWIP para España, Portugal y Latam, Carlos Costales, también tiene una cosa clara: las cuentas corrientes, los depósitos y los monetarios, grandes triunfadores de los dos últimos años, ofrecerán rentabilidades muy bajas. Ante esta realidad, aunque cree que no hay que renunciar a estos productos, aconseja reducir el peso de estos activos, según el riesgo que cada uno esté dispuesto a asumir.Para los inversores que quieran pasar a la siguiente fase de riesgo, Costales apuesta por los fondos de bonos corporativos. Las rentabilidades alcanzadas en 2009 se logran habitualmente en dos o tres años, pero pese a todo cree que sigue habiendo oportunidades. Y en renta variable, los expertos de SWIP prefieren la bolsa norteamericana y la emergente, y apuestan por mantener exposición a empresas nuevas y dinámicas que no existen en Europa.Los emergentes son también una buena opción para la subdirectora general de Schroders para España y Portugal, Carla Bergareche. El argumento es contundente. A su juicio, hemos sido testigos de uno de los hechos económicos más relevantes desde la Revolución Industrial: las economías emergentes, que en los años 50 aportaban cerca del 20% al crecimiento mundial, en 2009 han aportado el 100%. Son las únicas con crecimiento positivo, y en los próximos 20 años contribuirán con entre un 70% y 75% al PIB mundial. Con estas cifras es lógico que los expertos apuesten por que la deuda y la renta variable emergente sean, de nuevo, un activo de valor en este año 2010. Pero hay que tener en cuenta una cosa: no hay que dejarse llevar por el atractivo de las rentabilidades. Los expertos advierten que es necesario ‘medir’ el perfil de riesgo.