Los inversores vuelven a pedir fondos monetarios ante la promesa de los bancos centrales

Agua, gota, liquidez, flujos
hughletheren, Flickr, Creative Commons

Ante la promesa de más estímulos monetarios, los inversores demandan fondos de renta fija. Y ahora ese apetito voraz se ha contagiado a los monetarios. En julio entraron 46.000 millones de euros en money market UCITS; de las grandes categorías, la que más vendió en términos netos.  Pero es una tendencia que ha ido acelerando a lo largo del año a medida que los bancos centrales confirmaban su compromiso con los mercados.

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Gráfico: Datos de EFAMA, a julio de 2019. 

Y se nota tanto en Europa como en Estados Unidos. Como ya ocurrió en 2007 y 2008, cuando la Reserva Federal bajó los tipos para responder a la crisis financiera, los flujos se han disparado en los monetarios. Según el gráfico que aporta Bank of America Merrill Lynch, no se veía un ritmo de entradas así desde la caída de Lehman Brothers. 322.000 millones de dólares en flujos netos durante 2019.

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Con la gran diferencia de que ahora los inversores tienen a sus espaldas una década de rally en los bonos que ha secado las perspectivas de rentabilidad para este tipo de productos.

Este apetito por la renta fija es el principal motor para que las ventas netas de fondos UCITS hayan tocado máximos de 18 meses, según analiza Bernard Delbecque, director senior de economía y análisis de EFAMA. De manera ininterrumpida el dinero ha entrado con fuerza hasta suponer 191.000 millones de euros en ventas netas de UCITS de bonos hasta julio. A eso se suman los 61.000 millones en monetarios.

Para poner cifras que contextualizan: en UCITS las ventas netas totales este año suman 172.300 millones de euros. Esto es, que la demanda por renta fija está haciendo de colchón ante las salidas en los fondos de renta variable, que pierden casi 63.000 millones en el mismo periodo.

Esta tendencia se explica por el gran dilema al que se enfrentan los inversores. Por un lado, buscan adelantarse a la reactivación de los estímulos monetarios a través de fondos de renta fija. Pero por otro, no renuncian a proteger su capital en un contexto de mercado en el que la macroeconomía manda señales de alerta.