"Los fondos de volatilidad no sólo son rentables en periodos de turbulencias"

Kamil Molendys, Unsplash

Las fuertes fluctuaciones en los precios de las acciones han supuesto el caldo de cultivo ideal para los fondos de volatilidad, pero el hecho de que las bolsas se estabilicen no tiene por qué significar que los productos que sacan partido de esta variable vayan a dejar de ser rentables. "Los fondos de volatilidad no sólo son rentables en periodos de turbulencias", afirma Antonie Lim, co gestor de los cinco fondos de volatilidad de UBS Group. "Un fondo de volatilidad puede tomar ventaja de cualquier nivel de volatilidad a través del arbitraje. Puedes comprarla o venderla jugando con las diferencias de precios que existen entre la volatilidad de los valores a distintos plazos", explica Lim.

El gestor reconoce que, en teoría, hay más oportunidades de negocio cuando la volatilidad es más alta, ya que se mueve más rápido. Sin embargo, el único elemento imprescindible para obtener rentabilidad es que el mercado de opciones vinculadas a la volatilidad sea líquido, algo que no ha dejado de suceder ni siquiera tras la crisis del crédito y la caída de Lehman.

Batir al Eonia

Los fondos direccionales están más expuestos al aumento y la reducción de la volatilidad, pero existen otras estrategias cuyo objetivo de rentabilidad va más allá del entorno de mercado. UBS cuenta con un producto direccional, el CCR Long Vol, que proporciona una exposición positiva al nivel de volatilidad del mercado. Pero el resto de los productos de la gama tienen un objetivo de retorno absoluto y, por tanto, buscan ser neutrales a los mercados, tanto de renta variable como de volatilidad. Estos productos se miden con el índice Eonia, sobre el que pretenden añadir un plus de rentabilidad en función del riesgo objetivo, que se mide en términos de VaR.

Proridad: controlar el riesgo

Para Lim el rasgo diferencial de la familia de producto que él cogestiona junto con otros dos profesionales, es el seguimiento pormenorizado del riesgo. La entidad cuenta con un cuarto gestor especializado única y exclusivamente en monitorizar esta variable a tiempo real a través de distintas técnicas de control del riesgo como el stress testing.

Además, en el caso de UBS los gestores no utilizan herramientas cuantitativas para la gestión de estos productos, sino que se decantan por un estilo mucho más tradicional para la selección de valores en el que tienen en cuenta las características de las compañías y también el entorno macroeconómico. Los fondos de volatilidad que utilizan un enfoque cuantitativo pueden cometer el error de comprar volatilidad cuando esta cara si así se lo indica el modelo, mientras que nosotros manejamos información del mercado a tiempo real, explica Lim.