Los fondos de pensiones viven su peor trimestre en un año: salen 298 millones netos del sistema

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Dezege Producciones, Flickr, Creative Commons

La industria de pensiones española no levanta cabeza. Después de saldar en 2018 su primer año con reembolsos netos tras años de aportaciones netas al sistema, durante el primer trimestre de este año ha continuado esta tendencia negativa. Según los datos de Inverco, entre enero y marzo las aportaciones acumuladas fueron de 882 millones, mientras que las prestaciones de 1.180, insuficientes para evitar que el trimestre saldara con 298 millones de reembolsos netos. El mayor importe que ha salido en un trimestre desde hace justo un año (en el primer trimestre de 2018 salieron 316 millones netos).

Por sistemas, ha sido el individual el que más ha penalizado, con prestaciones netas de 175 millones netos. Desglosados, salieron 111 millones de renta fija mixta, 102 millones de renta fija corto, 37 millones de renta fija largo y 17 millones de garantizados. En realidad, solo se han salvado aquellas categorías con un componente de renta variable en sus carteras, bien mixta (57 millones de entradas netas) bien pura (35 millones). Por su parte, el sistema asociado apenas perdió poco más de medio millón.

Aun así, el patrimonio de todos los sistemas creció, fundamentalmente impulsado por el buen comportamiento de los mercados durante el arranque de 2019. En concreto, los activos bajo gestión del sistema individual crecieron un 3,87% con respecto al año anterior, hasta los 75.049 millones de euros; seguido el sistema asociado, con un incremento del 3,85%, hasta 860 millones; y el de empleo, con una subida del 2,84%, hasta 34.769 millones.

Posicionamiento de las carteras

Ante la baja expectativa de rentabilidad de la renta fija, los fondos de pensiones siguen virando sus carteras hacia la bolsa, incrementando la exposición de sus carteras a esta última. Según se desprende de los datos de Inverco, la exposición de estos productos a la renta fija se ha mantenido prácticamente igual, desde el 47,8% de diciembre hasta el 47,6% actual. Sin embargo, el peso de la renta variable en sus carteras ha pasado del 32,4% hasta el 35,3%.

En realidad, esta tendencia ya se venía observando desde hace tiempo, con especial fuerza en los últimos dos años. Por contextualizar, los activos de deuda llegaron a pesar un 63% de las carteras de los fondos de pensiones españoles en el año 2013, poco después de que el bono español alcanzara cotas del 6%. Por aquel entonces, las acciones apenas pesaban un 19% en los porfolios.