Los cambios en el statu quo comercial ofrecen oportunidades

Mario_Gonza_lez_y_A_lvaro_Ferna_ndez_Arrieta_-_Capital_Group_1
Cedida por Capital Group

TRIBUNA de Mario González y Álvaro Fernández Arrieta, responsables de Desarrollo de Negocio para España, Portugal y Andorra. Comentario patrocinado por Capital Group.

El temor a una guerra comercial que ponga fin a las décadas de paz que ha traído consigo la globalización es uno de los principales miedos de los mercados globales en 2018.

Prácticamente desde principios de año, los ataques en forma de aranceles de Estados Unidos contra Europa, China y algunos de sus tradicionales socios comerciales han empañado el buen momento por el que atraviesa la economía mundial.  Nadie sabe cómo acabará esta nueva fase en la que se ha adentrado el mundo, aunque sí está claro que traerá cambios y que en esos momentos siempre surgen oportunidades que hay que saber aprovechar.

Si hay algo que destaca en este último trimestre del año que está a punto de comenzar es que continúa la recuperación económica a nivel global gracias a unas dinámicas que siguen muy entroncadas en las políticas monetarias de los grandes bancos centrales del mundo.

Pero a pesar de lo que dicen los datos macroeconómicos la economía global no transita por un camino exento de riesgos. Ante el endurecimiento de la política monetaria, los conflictos comerciales, el incremento de la volatilidad y las elevadas valoraciones es posible que los inversores comiencen a preguntarse qué puede pasar a partir de ahora.

Pero quizá sea la evolución del comercio internacional el problema lo que más preocupa a los inversores por el aumento de las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos. También genera incertidumbre la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, así como que se mantenga la ruptura entre el Reino Unido y la Unión Europea.

Nadie sabe con certeza cómo va a cambiar el complicado juego de equilibrios de poder en el tablero del comercio mundial. Hasta el momento, los aranceles impuestos por los diferentes gobiernos a sus rivales en el juego de la globalización no parecen haber afectado mucho a la economía, aunque se desconoce qué puede ocurrir a partir de ahora.  

Para una gestora como Capital Group, los momentos de incertidumbre generan también grandes oportunidades.  Es mucho lo que puede cambiar en un futuro a nivel comercial, y el resultado continúa siendo incierto. Sin embargo, durante los últimos veinte años, se han producido cambios de gran magnitud que han transformado por completo el comercio internacional de forma en muchos casos irreversible.

Los cambios en los regímenes económicos y comerciales y los puntos de inflexión de los mercados ofrecen a los gestores la oportunidad de aprovechar la distorsión de los precios a corto plazo y de invertir en empresas atractivas con potencial de rentabilidad a largo plazo.

Si el siglo XX se caracterizó por el espectacular aumento registrado en el traslado de mercancías y de materias primas industriales, el siglo XXI viene marcado por la rápida digitalización de los servicios. Las plataformas tecnológicas están facilitando el comercio digital, lo que también se conoce como la «economía del conocimiento». Además, resulta complicado medir estos cambios según los patrones tradicionales o controlarlos mediante normativa, por  lo que los flujos de datos y de capital mediante redes digitales son difíciles de detener.

Entre las empresas que están creciendo en la era del comercio digital destacan Alphabet (Google), que junto con Facebook domina la publicidad en línea. No podemos ignorar a  Amazon, que está transformando por completo los sectores de venta minorista y de servicios en la nube. Por último, es preciso mencionar a Priceline, la mayor agencia de viajes por  internet del mundo. Varias empresas chinas de internet también dominan su propio mercado, como Alibaba y Tencent. Tan sólo es cuestión de saber identificar las oportunidades que hace emerger este nuevo contexto.

Captura_de_pantalla_2018-09-05_a_las_19