Las gestoras reivindican un mayor peso de Latinoamérica en las carteras

En las carteras de los inversores españoles debería haber un mayor hueco para Latinoamérica. Es el mensaje central que han defendido los representantes de Santander AM, BBVA y Renta 4 durante una de las conferencias del 12º Foro Latibex que se celebra en Madrid. "La inversión de las IIC europeas y españolas en la región es proporcionalmente muy pequeña frente al peso que tiene Latinoamérica en términos de PIB mundial y frente su potencial, lo que deja abiertas las puertas a grandes oportunidades”, comentó Jesús González Nieto-Márquez, vicepresidente ejecutivo de Latibex y moderador del debate.

Entre las causas está la reticencia al cambio, la tardanza del inversor español a la hora de diversificar la cartera, la actitud de las entidades financieras o la percepción de riesgo de la región. “La próxima década será de Latinoamérica, que no es sólo una moda, sino un complemento necesario en las carteras”, afirmó en su discurso inaugural Antonio Zoido, presidente de BME, convencido de que el porcentaje “no puede sino crecer”.

De hecho, los gestores de fondos europeos dedican sólo un 4,6% de su patrimonio a la región, los de la zona euro el 3,4% y los españoles menos del 2%, frente a las posiciones superiores del 5% en Reino Unido o Francia. Una cifra que contrasta con la posición de las empresas españolas en la región. “Las empresas nos están marcando el camino a seguir para buscar rentabilidades adicionales y cada vez tiene menos sentido la reticencia, pues, aunque el hombre es un animal de costumbres, la economía mundial está sufriendo cambios estructurales y rebalanceando su crecimiento”, afirmó Elena Eyries, directora global de Inversiones de Santander AM, convencida de que cada vez habrá mayor apertura por parte de los inversores aunque sólo sea porque “los hechos demuestran el potencial de Latinoamérica”. La experta negó la existencia de una burbuja en los mercados, señalando que hay capacidad para acoger nuevos flujos en unas economías sólidas y que aglutinan la inversión y el dinero.

Para Juan Pablo Jimeno, director de gestión de activos tradicionales en BBVA, los españoles tardan más en diversificar las carteras que los demás, aunque las ideas y las facilidades de acceso a la región acabarán dejando atrás las excusas y “llevarán el dinero hacia Latinoamérica”. Jimeno comparó el interés en la región de otros países como Japón, donde la promoción es muy intensa. De hecho, de los 3.000 instrumentos internacionales que invierten en Latinoamérica, con 960 billones de dólares en activos, el 6% viene del país nipón, el 44% de EEUU y sólo el 19% de Europa. “En España los cambios tardan en producirse: incluso pasar del mercado español al EuroStoxx llevó tiempo, pero esta vez esos cambios serán liderados por la promoción de las entidades financieras y los productos que facilitan el acceso”, comentó.

En el caso de BBVA, de los 205 billones de dólares bajo gestión en fondos de pensiones e inversión, aproximadamente el 60% está posicionado en Latinoamérica, una región responsable también de un tercio de los beneficios generados por el banco en el último semestre. “Latinoamérica está aquí para quedarse, y cada vez se habla menos de emergentes y más de esta región”, apostilló.

Para Jesús Sánchez Quiñones, director general de Renta 4, a veces es la propia entidad, y no sólo el inversor, la que tiene que cambiar de mentalidad. “Es más fácil explicar a los clientes la caída de un valor europeo que latino, pero la percepción el riesgo tendrá que cambiar”, afirmó. Para el experto, la mayoría toma las decisiones mirando al retrovisor, en vez de mirar al frente. “Teniendo en cuenta la situación macroeconómica, Brasil, México y Chile presentan grandes oportunidades”, indica, asegurando que no se invierte más por la mayor percepción de riesgo, inestabilidad política, su historia de quiebras, la inestabilidad cambiaria, el escaso conocimiento de la realidad económica y la poca mentalidad del peso de los países, que en vez de emergentes cree que son “emergidos” y que ven continuas mejoras en sus ratings, al contrario que el mundo desarrollado.

Una gran oportunidad con facilidades de acceso

Con respecto al potencial de la región, Eyres destacó la contribución de estos países al crecimiento mundial, superior al 50%; la ausencia de problemas de deuda; una población mayor en crecimiento, más joven y con mejoras en su calidad de vida; su actividad a la hora de invertir y atraer inversión, por ejemplo en infraestructuras, con 6 trillones de dólares en proyectos durante los próximos 3 años; y sus amplios recursos naturales. La gestora puso como ejemplo una fábula sobre la necesidad de salir al exterior a buscar oportunidades. “Hemos vivido muy bien con tipos de interés muy altos que daban a las inversiones sin riesgo muy buenos retornos, pero ahora eso se acabó y los mercados emergentes son la oportunidad”, comentó.

Así, en un mercado que se mueve entre el miedo a la deflación, que dispara la compra de bonos, y el temor a la inflación, que lleva a los precios del oro a vivir una locura en línea con la de la conquista del oeste americano, “los inversores pueden optar por comprar rentabilidad a través de renta fija emergente en mercados como Brasil o México -que cotizan a un riesgo menor que el de Italia con un retorno mucho mayor-, o comprar crecimiento, con la renta variable, que no está cara”, señaló.

Sobre las posibilidades de acceso a la región, Eyries definió Latibex como “un auténtico lujo”. Jimeno dio más detalles, comentando las posibilidades de compra directa de acciones, con respecto a la cual “la unión de las bolsas andinas facilitará el acceso”, la diversificación a través de otros instrumentos como los “equity swaps” (que operan sobre índices que permiten un acceso general al mercado sin hacer selección de valores) o los derivados, y la inversión en fondos, de gestión activa o pasiva. “Los fondos son el instrumento de diversificación con más regulación y dirección hacia el inversor retail”, apostilló, haciendo hincapié en el desarrollo de los ETF, también dentro de BBVA AM.