Las 10 cosas que, como inversor, debe esperar tras el Brexit

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Sukwendo, Flickr, Creative Commons

La reacción de los inversores a la decisión del Reino Unido de abandonar la UE ha sido inmediata. Lo primero ha sido vender activos de riesgo, lo que ha provocado el desplome de las bolsas europeas y la ampliación de diferenciales en los mercados de bonos corporativos. Lo siguiente, buscar refugio en lo que históricamente se consideran activos refugio, como el oro, el dólar, la deuda pública americana o los bunds alemanes, cuya rentabilidad cotiza actualmente en mínimos históricos (la tir del bono alemán a 10 años ya está en el -0,06% y la del 15 años también ha entrado en terreno negativo). Sin embargo, ahora la pregunta más importante que se hacen los inversores es qué esperar de cara al futuro. Funds People ha recopilado las opiniones de profesionales de 10 gestoras de activos en las que dan a conocer sus expectativas sobre el comportamiento que, de aquí en adelante, podrían mostrar tanto los mercados de renta variable como de renta fija. Muchas de sus reflexiones recogen cuál es el sentir de la mayoría de los participantes del mercado en este momento.

1. LA EVOLUCIÓN DE LA LIBRA SERÁ CLAVE. John Greenwood, economista jefe en Invesco. “El consenso es que a corto plazo la decisión debilitará la libra e impactará en el crecimiento económico británico. La libra será un instrumento clave a observar en el corto plazo, ya que los movimientos de la divisa determinarán probablemente el alcance de la respuesta del mercado. El sentimiento inicial es negativo con una considerable caída de los mercados, pero la pregunta es, ¿cuánto? Hemos visto mucha debilidad hasta el momento, así que algunos de los sentimientos negativos estarán ya descontados. Es probable que haya un acto reflejo como respuesta, seguido por un rally del mercado ya que la gente comenzará a pensar más detenidamente sobre las implicaciones más amplias del debilitamiento de la libra”.

2. HABRÁ VOLATILIDAD y LA PRIORIDAD DE LAS CARTERAS DEBE SER LA PRESERVACIÓN DE CAPITAL. Philippe Ithurbide, director global de análisis de Amundi, y Didier Borowski, responsable macro de la firma. “Se abre una etapa con muchas incógnitas. La decisión de los ciudadanos británicos abre un periodo de incertidumbre en el Reino Unido y Europa que, a corto plazo, provocará volatilidad en los mercados financieros”. Según Azad Zangana, economista europeo en Schroders, "el resultado de las urnas es un gran shock para los inversores. La reacción ha sido vender los activos de riesgo. La incertidumbre seguirá siendo alta durante algún tiempo y el daño total que la decisión causará a la economía no será visible durante muchos años". En el trasfondo subyace el efecto que pueda tener para la economía y los mercados el surgimiento de los partidos populistas. Para Nicola Mai, vicepresidente ejecutivo y gestor de PIMCO, "el aumento del riesgo político es un tema clave que nos lleva a concluir que las carteras deben dar prioridad a la preservación del capital y tener especial cautela en la eurozona”.

3. HAY SECTORES Y MERCADOS QUE SE VERÁN PERJUDICADOS Y OTROS BENEFICIADOS. Philippe Waechter, economista jefe en Natixis AM (filial de Natixis Global AM). “Los sectores más negativamente expuestos a la deuda pública británica y a la depreciación de la libra son el financiero (principalmente bancos domésticos pero también internacionales con una importante presencia en Reino Unido), el real estate, la construcción, las compañías de consumo con negocio puramente doméstico y el del transporte. Los sectores más resistentes a este escenario de Brexit son el sanitario (farmacéuticas incluidas), el energético y compañías exportadoras que se beneficien de la debilidad de la libra. El movimiento natural en renta variable será favorecer los mercados core europeos (Alemania, Suiza…) frente a los periféricos (España, Portugal, Italia…) y apostar por sectores defensivos (sanidad, telecomunicaciones, compañías de consumo no-cíclico y algunas utilities)”.

4. LA LIBRA, EL EURO Y LAS BOLSAS EUROPEAS PODRÍAN SEGUIR CAYENDO. Simon Ward, economista jefe en Henderson. “Es posible que la libra y la renta variable británica no hayan alcanzado su valor razonable a medio plazo, pero es probable que la actual falta de visibilidad política y económica lleve a los inversores a reducir su exposición, lo que implica que los precios podrían caer aún más a corto plazo antes de que se produzca un repunte”. De acuerdo con BlackRock, “con el tiempo vemos un euro más débil y presión sobre la renta variable europea, crédito y bonos periféricos, debido a la probable pérdida de puestos de trabajo en Europa y al menor crecimiento económico”.

5. LA DIVERSIFICACIÓN SERÁ CLAVE. Dominic Rossi, director mundial de inversiones del área de renta variable de Fidelity. “Hemos visto un movimiento reflejo en los mercados, que estaban mal posicionados de cara al resultado del referéndum. El final podría estar lejos todavía; cuando la polvareda se asiente y los fundamentales se reafirmen, probablemente la libra esterlina siga depreciándose frente al dólar estadounidense y el euro. Para los inversores, la diversificación es clave. Eso significa alcanzar un equilibrio entre los activos en libras esterlinas y en otras monedas, junto con activos de renta fija, que actuarán como depósito de valor. También es importante recordar que siempre habrá grandes organizaciones internacionales con balances muy grandes que ofrezcan cierta protección a los ahorradores en estos tiempos”.

6. ATENTOS A LAS OPORTUNIDADES QUE SURGEN. Steven Andrew, gestor de M&G Investments. “Las bolsas europeas han protagonizado caídas de dos dígitos en el día de hoy. No es una sorpresa y no nos resultaría extraño que se dieran fluctuaciones más drásticas ahora que el Brexit se ha confirmado. No obstante, estas caídas tan marcadas podrían representar una oportunidad”. Según Luca Paolini, estratega jefe de Pictet AM, “si hay suficiente apoyo de las autoridades y los bancos centrales están dispuestos a hacer lo necesario, puede ser apropiado reconstruir exposición a determinados activos. El mayor riesgo está en el continente europeo, pues ha aumentado el riesgo de fractura, aunque hay precedentes. Dinamarca rechazó el tratado Maastricht en 1992–las acciones europeas cayeron 15%- y más tarde votaron unirse a la UE”.

7. LA DEUDA PÚBLICA A CORTO PLAZO PODRÍA VERSE FAVORECIDA POR ESTA SITUACIÓN. Howard Cunningham, director de carteras de renta fija en Newton (BNY Mellon IM). “Con la ralentización de la actividad y el mayor distanciamiento de una posible subida en el tipo de interés, es probable que el resultado apoye la deuda pública a corto plazo. Es posible que la curva de los bonos del estado se vuelva más pronunciada con la búsqueda de mayor compensación por parte de los inversores debido a la incertidumbre a largo plazo. Sin embargo, la rentabilidad en general no sería necesariamente más alta. Es importante tener en cuenta que, aunque al principio los inversores vean el voto para la salida como algo negativo y deseen deshacerse de los activos denominados en libras, dudamos que los bonos del estado encabecen el listado de activos para ser vendidos. Los bonos corporativos denominados en libras se enfrentan a fuerzas contrapuestas y es posible que la mayor incertidumbre genere una prima de riesgo, es decir, mayores diferenciales de crédito, especialmente para emisores domiciliados en el Reino Unido”.

8. LA DEUDA PÚBLICA REFUGIO TAMBIÉN PODRÍA VERSE FAVORECIDA. Regina Borromeo, gestora de carteras en Brandywine (Legg Mason Global AM). “Prevemos que los tipos de interés británicos permanezcan en niveles bajos durante bastante tiempo, en vista de los efectos colaterales para el crecimiento, la confianza empresarial y los cambios en los planes de inversión. Sin embargo, la debilidad de la divisa y unas acciones de política monetaria más acomodaticia por parte del Banco de Inglaterra deberían aupar las perspectivas de inflación. Este incierto trasfondo debería favorecer a la deuda pública refugio, mientras que estos mercados turbulentos podrían brindar interesantes oportunidades de valor, especialmente en el segmento de la deuda corporativa”.

9. ATENTOS A LOS EFECTOS SECUNDARIOS. Claudia Von Turk, analista de banca en Lombard Odier. “Aunque esperamos debilidad en Reino Unido, los países en la periferia podrían verse aún más afectados dados los temores de contagio, sobre todo España, pero también Italia. Los bancos franceses, nórdicos, suizos y del Benelux se ven menos afectados directamente. Sin embargo, podría haber efectos secundarios. Si algunas monedas (el franco suizo, la corona danesa) son percibidas como refugios seguros, esto podría conducir a tasas aún más negativas –lo cual no es un buen asunto para los bancos. Aunque existe la posibilidad de otros referéndums (Países Bajos) que podrían afectarles, en general, los bancos nórdicos, los del Benelux y los franceses, están menos expuestos”.

10. LOS ACTIVOS DE EE.UU. SE VERÁN RESPALDADOS; CRÉDITO Y DEUDA EMERGENTE NO. Ken Taubes, director de inversiones en EE.UU. de Pioneer Investments. Los activos de Estados Unidos podrían tener un mejor comportamiento, en particular los bonos del Tesoro, mientras que vemos que las curvas de crédito y deuda emergente podrían verse presionadas con movimientos de venta, en particular por la percepción de que la demanda por petróleo de va a deteriorar en medio de este ambiente de aversión al riesgo.