La victoria de François Hollande para la presidencia francesa es un mal necesario para romper el eje Merkozy que ha dictado la política de la eurozona en los últimos años, a juicio de John Bennett, director de Renta Variable Europea de Henderson Global Investors, quien añade que, pese a lo que creyera Nicolas Sarkozy, esta alianza estaba claramente guiada por Alemania. Desafortunadamente, explica en su análisis, el tratamiento de austeridad recetado por los dos líderes está matando a la eurozona, mientras que la promesa de Hollande de renegociar el pacto fiscal europeo es necesario para promover el crecimiento, aunque a corto plazo abone un periodo de volatilidad en los mercados.
Para Sarkozy, aplicar estos cambios hubiera sido prácticamente imposible, explica Bennett, que considera que, sin embargo, puede ser relativamente sencillo para Hollande, dado que ha recibido el mandato del cambio por parte de los ciudadanos. El gestor cree que es posible que tanto Alemania como los mercados acaben por aceptar esta nueva estrategia.
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