La Superintendencia de Pensiones chilena aclara las inversiones de las AFP en las sociedades cascada de SQM

Según la Superintendencia de Pensiones, las inversiones en instrumentos realizadas por los fondos de pensiones al 9 de octubre de 2013, en SQM y sus sociedades controladoras, alcanzaba los 757,9 millones de dólares, lo que equivale al 0,46% del total de los fondos de pensiones.

Gráfico Superintendencia de Pensiones
Nota: para conocer la exposición de cada AFP a las sociedades cascada, les remendamos consultar el informe de la Superintendencia de Pensiones.

El gerente general de AFP Capital, Eduardo Vildósola, reconoció que las administradoras se sienten perjudicadas con el Caso Cascadas, y que hay "un daño estimado, por probarse, en cerca de los 400 y los 600 millones de dólares en las transacciones que se hicieron desde el 2009 en adelante", explicó el ejecutivo.

Los orígenes del conflicto

Básicamente, el Caso Cascada surge del enfrentamiento entre los accionistas de las sociedades Norte Grande y Oro Blanco. Estas dos empresas son las matrices Calichera, la sociedad con la que Julio Ponce posee el 30% de SQM, explica el medio local Pulso. La actual disputa empezó a gestarse a finales de 2011, cuando la empresa controladora propuso aumentos de capital cuyos objetivos desconocía el resto de los accionistas. Además, abril de 2012, la SVS suspendió la cotización de sus acciones tras ordenar la reversión de cerca del 65% de las utilidades para el ejercicio 2011, producto de una cuestionada operación que involucró 5 millones de títulos de la serie A de SQM.

Posteriormente, los accionistas minoritarios comenzaron a acusar de irregularidades en las empresas del grupo, consistentes en una serie de operaciones entre partes relacionadas que les habría restado valor a las compañías. En este conflicto entre el controlador e inversionistas minoritarios -principalmente Moneda, las AFP y Consorcio, que poseen más del 11,2% y el 15,7%, respectivamente-, terminó por trascender a la SVS y al Ministerio Público, quienes optaron por abrir una investigación.

Según indica el profesor Mauricio Jara, Ph.D., doctor en Administración de Empresas y académico de la Escuela de Negocios de la Universidad de Chile, estas sociedades cascadas no son un delito en sí, pues se trata de una forma administrativa que facilita operaciones dentro de grandes corporaciones que tienen diferentes empresas. El problema está en las operaciones que se realizaron a través de ellas y que, al parecer, han restado valor a las compañías en las que las AFP, por ejemplo, han invertido.