“La renta variable de Asia emergente sigue barata y la de América Latina está cara”

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Ruurno, Flick, Creative Commons

“La renta variable de Asia emergente sigue barata”. Al menos, para AXA Investment Managers, quien considera que la combinación de políticas monetarias expansivas a nivel mundial, de la reducción de las primas de riesgo y del repunte de la actividad económica en Asia representa un claro soporte para los mercados. “Además, si tenemos en cuenta la disminución de la prima de riesgo y un crecimiento de los beneficios que debería situarse entre un 10 y un 15% para 2013, los mercados bursátiles de Asia emergente siguen estando infravalorados en torno a un 10%”, afirman desde la entidad.

Los índices PMI manufactureros mejoraron en marzo solamente en Asia emergente, confirmando que la contracción registrada en febrero estaba ligada a efectos estacionales más que a un empeoramiento de la coyuntura. Asimismo, la producción industrial se recupera bastante más rápido en Asia que en las demás regiones emergentes, sin impacto importante de los efectos estacionales o de cambio después de la flexibilización monetaria ocurrida en Japón. En cuanto a las ventas al por menor, éstas se mantienen fuertes. “También progresan en América Latina, con el soporte de las últimas flexibilizaciones monetarias y de unas bajas tasas de paro”, indican. Sin embargo, esto no quiere decir que la visión sobre la renta variable latinoamericana sea la misma.

Es más: para los expertos de la gestora gala, los mercados latinoamericanos están caros. “Los niveles de precio de las acciones de América Latina no son demasiado atractivos en comparación con otros mercados emergentes. El mercado mexicano es uno de los más caros del universo emergente. Los múltiplos de valoración tampoco son atractivos en Brasil. No obstante, el repunte esperado del crecimiento de los beneficios a lo largo del año debería proporcionar un soporte que será bienvenido en los mercados de América Latina”, indican en uno de sus últimos informes de Estrategia de Inversión.

¿Y qué hay de Rusia? Según AXA IM, los beneficios de las compañías rusas se han visto afectados. “La debilidad de la demanda externa pesa sobre el crecimiento de los beneficios de las compañías rusas, esperándose que se mantenga en esos niveles débiles aún en el caso de que se produjera una mejora progresiva de acuerdo con nuestro modelo de crecimiento de los beneficios. Sin embargo, es poco probable que podamos observar a corto-medio plazo un crecimiento de los beneficios tan importante como el registrado en los últimos quince años, ya que el precio del petróleo sigue estando penalizado por un nivel de crecimiento mundial por debajo de su potencial”, aseguran.