La inversión en compañías con baja volatilidad

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Cedida por Robeco

Tras varios años de estudios empíricos, los Doctores Pim Van Vliet –gestor del fondo Robeco European Conservative–, y David Blitz –Head of Quantitative Research de Robeco–, entre otros, han profundizado en una vía de investigación abierta por Fisher Black y Myron Scholes a mediados de los 70. En sus estudios concluyen, en contraposición a la teoría subyacente en el modelo CAPM, que las compañías con menor riesgo ofrecen una mejor relación riesgo/retorno que las compañías con mayor volatilidad.

La utilización generalizada del “tracking error” y la medición del retorno relativo frente a un “benchmark” permiten la aparición de anomalías en los mercados de renta variable y renta fija que gestores con un enfoque diferente, especialmente en los mercados de mayor tamaño y más líquidos, pueden explotar.

Según varios estudios, hay diversos motivos que hacen que los gestores estén incentivados a sobrepagar por compañías con mayor riesgo. Entre otros, destacan que las compañías con menor volatilidad tienen “tracking errors” más altos; que los gestores prefieren invertir en compañías más apalancadas en lugar de apalancar sus fondos; que su compensación es asimétrica en mercados alcistas y bajistas, y que seleccionan compañías con mayor beta y, aparentemente, mayor potencial rendimiento relativo. Los inversores particulares aportan su grano de arena al comprar aquellas acciones que más aparecen en los medios por sus elevados retornos sin tener en cuenta el riesgo.

La inversión en compañías con baja volatilidad permite explotar estas ineficiencias. No obstante, es un estilo de inversión lleno de potenciales trampas. Para evitarlas, en las estrategias Conservative de Robeco, combinamos factores estadísticos, de valoración y de sentimiento con el análisis del riesgo “distress”. Este último, detecta y elimina de la cartera un elevado porcentaje de las compañías en dicha situación y mejora significativamente el rendimiento de los fondos gestionados según criterios de baja volatilidad.