“La inmensa mayoría de los planes de pensiones españoles no añaden valor”

javier
Morningstar

El 32% de los planes de pensiones que hay en España son garantizados. Esto significa que de los 1.400 productos que existen actualmente en el mercado, 500 corresponden a este tipo de productos. Si a esto añadimos los fondos de rentabilidad objetivo, la cifra alcanza los 739, lo que representa prácticamente el 53% de la oferta total. Y, a juzgar por la dirección que han tomado los nuevos lanzamientos vistos en 2014, no parece que esto vaya a cambiar. Casi la mitad de los planes que se lanzaron en 2014 son garantizados. El año pasado vencieron 15 productos y se constituyeron 29. Haciendo un análisis de la nueva oferta de fondos garantizados se observa que la mayoría son a un vencimiento de entre 5 y 10 años. Sumando la nueva oferta de garantizados y productos de rentabilidad objetivo, esta representa dos tercios del número de fondos que se lanzaron en 2014.

“Para inversores que quieran pensar en su jubilación, este tipo de producto no tiene ninguna utilidad, no satisface sus necesidades en cuanto a su horizonte de inversión”, asegura Javier Sáenz de Cenzano, director de Análisis de Morningstar para Iberia e Italia. “La inmensa mayoría de los planes de pensiones españoles no añaden valor. De los 661 que hay en España que no son ni garantizados ni de rentabilidad objetivo, sólo el 12% baten a su índice MPT (es el índice que utiliza Morningstar para cada una de las categorías). Los de renta variable con un track record superior a los cinco años contabilizan 136, de los que sólo el 7% (10 ) han logrado batir a su índice. De estos 10 productos, nueve son de renta variable española y uno de bolsa europea. No hay ningún fondo de renta variable americana, global, eurozona o emergentes que haya batido a su índice a cinco años. Esto es dramático”.

Cenzano ve necesario dar un impulso a los planes de inversiones orientados a la inversión a largo o muy largo plazo, sobre todo a los de renta variable, cuya cuota de mercado actual es de apenas el 10%. El problema –a su juicio- es la calidad de la inmensa mayoría de estos productos. “Por un lado estamos pidiendo a los inversores en planes incrementar su exposición a renta variable, pero tenemos que empezar por ofertar productos de calidad. No podemos ofrecerles productos que no añadan valor y encima pedirles que inviertan en ellos. Como no hay competencia extranjera en este tipo de productos, el mercado está muy dominado por los bancos y seguimos sin ver avances en este sentido”. La fórmula que plantea Morningstar es la creación de unas cuentas tipo 401k o IRA en EE.UU, que el inversor constituye con el fin de la jubilación pero que permiten al partícipe elegir los productos en los que invertir. “Supondría una muy dura competencia para los fondos de pensiones españoles y un aspecto clave no solo en la industria sino para la sociedad española en su conjunto”.

Transparencia y más información al partícipe

Cenzano también aprovechó la ceremonia de entrega de los Premios Morningstar 2015 para hacer una valoración sobre los cambios que ha introducido la nueva normativa en los planes de pensiones. El primer tema que tocó fue el relativo a la información que se le da al partícipe, por el que va a ser obligatorio para los planes de pensiones publicar un documento de datos fundamentales similar al KIID y mostrar las carteras completas de los activos en los que invierten.

“Todo lo que sea dar más información al partícipe nos parece positivo. Sin embargo, en la forma en la que ha sido regulado le vemos dos problemas: primero, que solo los partícipes existentes pueden solicitar las carteras completas. Esto hace que el momento más importante en el que se necesita información para tomar tu decisión, el inversor no dispone de ella. Además, la cartera para los partícipes ya existentes debe ser pedida expresamente y por escrito, lo que es bastante poco realista para el inversor medio español. La opción más adecuada, para nosotros, sería que el regulador (DGS) publicase esta información de forma regular en su página web, abierto a todo el público, tal y como hace la CNMV para fondos de inversión”, afirma.

Comisiones más bajas, pero...

Siguiendo con la transparencia, Cenzano critica el hecho de que no se conozca la ratio de gastos totales (TER) de un fondo de pensiones, esto es, cuánto está realmente pagando un inversor por su plan de pensiones. “Esto podría haber sido incluido y creemos que es un tema de transparencia bastante importante”. Reconoce que se ha producido una rebaja de comisiones de gestión, si bien con un alcance muy limitado. “El impacto ha sido muy reducido en las categorías relevantes. La comisión media que existía antes de la regulación y la actual muestra que ha habido una rebaja de tarifas en los productos de más riesgo (renta variable de diferentes regiones y mixtos agresivos), pero la cuota de mercado de estos productos es muy limitada, por lo que el impacto real en el bolsillo de los partícipes en planes de pensiones ha sido muy limitado. En las categorías donde hay más volumen invertido (garantizados, renta fija corto plazo y mixtos) el impacto ha sido muy pequeño”.

Lo que propone Morningstar como solución es que cada categoría o tipo de activo tenga un límite diferente. “Es bastante lógico pensar que los productos que tengan menos valor añadido, deban tener menos comisiones. El reducir las comisiones en productos de renta variable puede tener un efecto contraproducente, ya que puede resultar un incentivo a las gestoras para lanzar productos de menor valor añadido y menor coste, de forma que puedan mantener sus márgenes. Esto lo hemos visto en 2014 con el lanzamiento de productos garantizados y rentabilidad objetivo”. Otro aspecto que quiso tocar es la regulación de los traspasos, que ahora serán más rápidos, lo cual le parece positivo, aunque “no va a tener mucho impacto”. Por el contrario, no aprueba la reducción a la aportación máxima de la que puede disfrutar un partícipe. “Nos parece un contrasentido que se hayan reducido los límites deducibles a la aportación máxima a un plan de pensiones”.

Planes de Ahorro 5: productos que presentan “deficiencias claras”

En lo que respecta a los planes de Ahorro 5, Cenzano aprecia “deficiencias claras” en este tipo de productos.  “No abordan el problema principal, que es la fiscalidad de las prestaciones. Siempre hemos dicho que queremos que sean más atractivas. Nuestros análisis demuestran que solamente si inviertes a muy largo plazo antes de tu jubilación y reinvertías el beneficio fiscal en el propio plan, realmente el beneficio fiscal era existente; de lo contrario, pongo en duda de que existiese tal beneficio fiscal. Este tema no ha sido abordado en la nueva normativa”.