La Française ha lanzado el La Française Carbon Impact 2026, un fondo de vencimiento fijo con una estrategia baja en carbono. Esta nueva solución se apoya en dos de las áreas del grupo: la inversión responsable y la gestión de fondos con vencimiento fijo. El objetivo de La Française Carbon Impact 2026, en el horizonte de inversión de siete años recomendado, es superar, después de comisiones, a los bonos emitidos por el Gobierno francés con vencimiento en 2026.
El fondo invertirá en una cartera objetivo de 120 a 200 títulos (no contractual), cuyos emisores habrán sido objeto de un análisis medioambiental, social y de gobernanza (ESG) mediante un método desarrollado por Inflection Point por La Française; posteriormente serán sometidos a una segunda ronda de análisis temático que combina el análisis de la huella de carbono con el análisis financiero. El fondo se compromete a tener una cartera con una media ponderada de emisiones de gases de efecto invernadero por euro invertido al menos un 50% inferior a un universo de inversión comparable.
El fondo utiliza una estrategia de gestión discrecional. Puede invertir hasta el 100% de su patrimonio neto en obligaciones emitidas por empresas del sector privado o semipúblico (incluidos los bonos verdes), ya sea con calificación de grado de inversión (hasta el 100%) o en inversiones especulativas de high yield (hasta el 70%), con vencimientos hasta el 31 de diciembre de 2026. Los emisores de países de la OCDE pueden representar hasta el 100% de la asignación geográfica, mientras que los emisores no pertenecientes a la OCDE pueden constituir hasta el 10%.
La gestora se muestra convencida de que las empresas con procesos de transformación con bajas emisiones de carbono estarán mejor protegidas contra los crecientes riesgos climáticos y regulatorios que afectan a su sector. Además, también confía en que estas compañías recibirán el respaldo de los inversores conscientes de los retos relacionados con el clima. La estrategia de La Française Carbon Impact 2026 consiste en financiar a los agentes económicos verdaderamente comprometidos con la transición energética, con objetivos de reducir sus emisiones de carbono para luchar contra el cambio climático.
