La Fed impulsa el apetito por el riesgo de los gestores, que apuestan por renta variable y commodities

La segunda ronda de relajación cuantitativa llevada a cabo por la Fed la semana pasada sirvió para dar un impulso al apetito por el riesgo de los inversores que, según la encuesta mensual de gestores de noviembre de BofA Merrill Lynch en la que participaron 218 profesionales con 634.000 millones de dólares bajo gestión, incrementaron su exposición a renta variable y materias primas. Sin embargo, consideran que una potencial corrección puede estar cerca y también empiezan a preparse ante una subida de la inflación.

En noviembre, el 35% de los gestores cree que la economía mundial se fortalecerá el próximo año, frente a sólo el 15% que lo creía hace un mes. Y aún mayor (el 41%) es el porcentaje de gestores que estima que los beneficios empresariales aumentarán el 10% o más durante el próximo ejercicio. La mejora de algunos datos macroeconómicos y el programa de compra de bonos por parte de la Fed explican estas mejores perspectivas, con la excepción de China y Europa. Esta constructiva visión ha propiciado que el 41% de los inversores sobreponderen renta variable, desde el 27% que lo hacía en octubre y el 31% de septiembre.

Así, sus estrategias de inversión han subido hasta un nivel de riesgo “normal” y el número de inversores globales que sobreponderan la liquidez alcanza el nivel más bajo en siete años, debido a que la mayoría ha recortado su horizonte de inversión: el 30% dice que es menor al normal, desde el 25% de hace un mes. “Las posiciones de cash están en peligrosos niveles, del 3,5% de los portfolios,” afirma Gary Baker, responsable de estrategia de renta variable europea en BofA Merrill Lynch Global Research, pues hace a los gestores más vulnerables ante potenciales eventos del mercado, como la subida de los precios, noticias negativas sobre deuda soberana europea o un repunte del dólar.

Y es que la encuesta también revela una mayor preocupación por la inflación y el temor a una corrección a corto plazo. “Es posible que el rally de fin de año ya haya tenido lugar, con lo que los inversores son vulnerables a situaciones de riesgo, como una profundización de la crisis de la deuda europea o un repunte del dólar”, comenta Michael Hartnett, estratega jefe de renta variable global de BofA Merrill Lynch Global Research.

Con respecto a la inflación, los gestores temen que la política expansiva de la Fed tenga sus efectos, y por eso han tomado posiciones para aprovecharse de y/o protegerse ante un escenario inflacionista. Y es que la proporción de gestores que esperan un aumento en los precios en los próximos 12 meses se sitúa en el 48%, desde el 27% de octubre. Además, el 45% cree que la política monetaria global es “demasiado estimulante”. De ahí la apuesta por renta variable y por materias primas.

Dentro de las bolsas, las alocaciones a los emergentes han seguido creciendo, hasta alcanzar en noviembre el nivel más alto en siete años. El 56% las sobrepondera, desde el 32% de hace dos meses. Con respecto a la ganancia de popularidad de las commodities, el 21% las sobrepondera, frente al 17% de hace un mes.

Por sectores, los gestores han incrementado posiciones en materiales básicos (con el 21% de sobreponderación, desde el 9% en octubre). En contraste, y frente a bolsas y materias primas, las asignaciones hacia bonos han caído: ahora el 36% del panel los infrapondera, desde el 24% de octubre.

Como principales riesgos, más de un tercio de los gestores globales identifica los riesgos soberanos de la UE como “clave”, lo que hace más negativas las perspectivas sobre la economía del continente: sólo el 23% de los europeos esperan que la economía de la región se fortalezca en los próximos 12 meses y la proporción que nombra la región como la mayor para infravalorar crece al 12%. “Los europeos están concentrándose en catalizadores de crecimiento fuera del continente”, afirma Patrik Schowitz, estratega de renta variable europea. “Las mayores asignaciones se dirigen a sectores exportadores y a recursos como tecnología e industriales”, apostilla.