Un debilitamiento de la economía mundial significa unos beneficios por acción (bpa) planos a nivel global para 2012, si bien los mercados bursátiles están descontando una contracción del orden del 20%, un porcentaje que, a juicio del equipo de estrategas de Citigroup, resulta demasiado pesimista, aún a pesar de que la economía europea entre en un nuevo escenario de recesión. “Los peores temores de los inversores no se materializarán, lo que hace probable que los mercados de renta variable obtengan en los próximos doce meses ganancias saludables”, afirman desde la entidad.
Entre los factores que contribuirán a debilitar el crecimiento del PIB mundial está la desaceleración de las economías de Estados Unidos y China, así como la más que previsible entrada en recesión de Europa. En este sentido, el servicio de estudios de Citigroup augura una caída media del PIB de la zona euro del 1,2% en 2012, un retroceso que será aún más intenso en España, cuya economía se contraerá un 1,9%, una previsión que está en línea con lo pronosticado recientemente por Goldman Sachs, que vaticinaba un decrecimiento económico para España del 1,5% para este año.
De acuerdo con las previsiones de Citigroup, las medidas de ajuste que está adoptando el Gobierno para reducir el déficit tampoco lograrán que el país evite la recesión en 2013, año en el que la entidad bancaria americana espera una nueva caída del PIB del 0,8%.
