“La deuda pública periférica es un activo barato y con potencial”

Cosimo_Marasciulo
Foto cedida

“Los últimos acontecimientos que han tenido lugar en Europa dan un respiro y permiten a los inversores seguir confiando en que se alcance una solución de largo plazo que resuelva la crisis de deuda soberana”. Así lo considera Cosimo Marasciulo, director de Renta Fija Soberana Europea y Divisas de Pioneer Investments, al asegurar que el procedimiento de rescate permanente puede ser probado muy pronto, con España como el candidato más probable a ser el primer solicitante. En este sentido, sea cual sea la vía que utilice el Gobierno de Rajoy para pedir la ayuda, “el enfoque de las reformas llevadas a cabo hasta ahora debe mantenerse”.

Según señala en un informe, de todo lo sucedido hasta la fecha, lo más importante tal vez haya sido la actuación del BCE. “El compromiso de Mario Draghi de hacer lo que sea necesario para salvar el euro podría haber evitado la ruptura de la eurozona, además de haber servido para mejorar el sentimiento del mercado". Hasta el momento, el ‘riesgo de convertibilidad’ había sido el factor que, en su opinión, habría provocado el ensanchamiento de los spreads de deuda soberana en la periferia europea. “Aunque sólo Grecia ha estado en claro peligro de salir del euro, países como España o Italia también se han visto afectadas por esas preocupaciones”.

En este sentido, una postura más flexible por parte de Alemania, partidaria ahora de combinar políticas de austeridad y crecimiento, ha ayudado a restaurar la confianza. “Un clima de respeto mutuo podría ayudar a caminar hacia una verdadera unión fiscal, lo cuál sería positivo”. Otro aspecto positivo según Marasciulo es que Italia no parece estar en la necesidad de requerir la ayuda aunque, en caso de finalmente necesitarla, su rescate sería tan ‘light’ como previsiblemente será en el caso español, que en todo caso iría antes que Italia.

A pesar del rally vivido en las últimas semanas, el director de Renta Fija Soberana Europea y Divisas sigue manteniendo una sobreponderación a deuda soberana periférica al entender que estos bonos “continúan estando baratos en comparación con los activos considerados seguros”. Aunque cree que los inversores siguen estando sobreponderados en activos seguros, asegura que éstos empiezan a ser conscientes de que esperar demasiado puede llevar a perder oportunidades de inversión. “Los activos más sensibles siguen baratos y tienen potencial”, algo que podría materializarse cuando las condiciones del mercado se normalicen.