La CNMV aprueba uno de cada dos expedientes para convertise en EAFI

Desde la entrada en vigor en la CNMV de la figura de EAFI, el organismo ha tramitado 272 expedientes, que incluyen diferentes peticiones, entre ellas las relativas al registro como entidad de asesoramiento financiero independiente. De estas últimas, 47 han sido aprobados hasta ahora y otras 42 han terminado sin autorización, lo que deja la balanza muy equilibrada. Entre las que no han logrado una respuesta positiva, la falta de aprobación se ha debido en 22 casos al desistimiento de las propias entidades y en los 20 restantes a la denegación por parte de la CNMV. Actualmente hay otras 41 solicitudes pendientes de autorización, según los datos aportados por Antonio Moreno, responsable de autorización y registros de la CNMV, en una presentación organizada por la asociación Aseafi (Asociación de Empresas de Asesoramiento Financiero) en la Bolsa de Madrid y patrocinado por Avalmadrid, Aviva Investors, Fidelity, Groupama, Invesco, Pictet y Thomson Reuters. En ella, definió a las EAFI como "un selecto club".

En el evento, Moreno aseguró que, en la medida en que la figura de las EAFI cuenta con gran relevancia en el futuro y unos requisitos homogéneos a nivel europeo, no resulta fácil lograr la autorización. “No se trata de una mera lista de asesores independientes, pues hay un aluvión de peticiones, sino de un selecto club que cumple unos determinados requisitos que garantizan su capacidad para prestar un servicio de alto valor añadido”, comentó.

Entre los requisitos destacó el cumplimiento de los códigos éticos, una estructura adecuada, el conocimiento de los clientes y los productos más adecuados, la experiencia y la honorabilidad. De hecho, las razones de la falta de éxito en la tramitación de algunos expedientes pueden ser cualquiera de ellas, desde la falta de experiencia hasta la carencia de la estructura necesaria, pasando por el incumplimiento de los criterios de honorabilidad, claves para Moreno.

Así, en el EFPA Congress 2009 celebrado el pasado verano, destacaba la importancia de este criterio como una de las razones que ha obligado a la CNMV ha moverse con pies de plomo en el análisis de los expedientes, ante la presentación de entidades con expedientes abiertos. “Hemos tenido algunos problemas con solicitudes de lo que en la jerga del sector se conoce como chiringuitos financieros, entidades investigadas por la propia CNMV o por otros supervisores, un tema de la máxima preocupación para la Comisión porque los chiringuitos destacan por sus malas prácticas y su acoso a los inversores”, comentó hace unos meses, indicando que una autorización indebida perjudicaría a los inversores, a la CNMV y al mercado en general.