“La bolsa sigue resultando mucho más interesante que la renta fija”

Bolsa
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"Puede que los mercados financieros globales aún disten mucho de la normalidad anterior a la crisis, pero al menos los inversores pueden divisar el camino que les llevará de nuevo allí. El riesgo de ruptura de la eurozona se ha desvanecido, Estados Unidos ha evitado caer en el precipicio fiscal y China ha realizado su traspaso del poder político, volviendo a la senda del crecimiento sostenido. Sin embargo, las políticas extraordinarias de los bancos centrales siguen vigentes y sus efectos continúan distorsionando los precios de muchos activos. Las inversiones realizadas hoy tienen que anticipar la vuelta a un panorama más habitual”.

Así lo asegura Dan Morris, estratega global macro de J.P.Morgan Asset Management en su último Market Insights, quien considera que, a pesar de las fuertes ganancias registradas por los mercados de renta variable desde 2012, la bolsa sigue resultando mucho más interesante que la renta fija si atendemos a las valoraciones y la rentabilidad prevista. “Los ratios precio-beneficio proyectados para el MSCI All Country World Index se aproximan al valor razonable, pero la media de la rentabilidad total ha sido de un 11,2% cada año desde 1985, cuando los mercados presentaban valoraciones similares. La liquidez seguirá siendo abundante gracias a la Fed y la confianza ha mejorado claramente a favor de la renta variable”, afirma.

A su entender, el cambio en la confianza de los inversores con respecto a la renta variable podría ser un importante factor impulsor de la rentabilidad este año. Los fondos de renta variable de los mercados desarrollados han registrado una media de reembolsos de casi 9.000 millones de dólares al mes entre 2007 y 2012, pero en lo que llevamos de año han recibido entradas cercanas a los 100.000 millones de dólares, según los datos de EPFR. Asimismo, los fondos de renta variable de los mercados emergentes han registrado entradas durante la mayor parte de la crisis, pero estas se han incrementado de forma considerable en los últimos tiempos, acercándose a las de la renta variable de los mercados desarrollados.

Escepticismo respecto a los bonos

“Es probable que las tires de la mayoría de las clases de activos de renta fija sean superiores al final del año que a día de hoy, lo que indica bajadas en los precios. Esto será solo en parte porque la Fed podría empezar a reducir el ritmo de las compras de activos durante el año, actualmente por valor de 85.000 millones de dólares al mes”. En su opinión, el mayor efecto sobre las tires de los bonos con grado de inversión ha sido el descenso de la demanda de activos considerados ‘refugio’.

“Dado que la demanda sigue disminuyendo, las tires de la renta fija con grado de inversión deberían incrementarse. Esto a su vez debería provocar una menor demanda de activos de renta fija de alto rendimiento, como por ejemplo la deuda de los mercados emergentes, con el consiguiente descenso de los precios y el aumento de las tires. Las tires de la deuda de los mercados emergentes y de high yield son ahora ya demasiado bajas con respecto al probable riesgo de impago, por lo que deberían reajustarse de una forma u otra”, asevera Morris.