La apuesta de BBVA por los fondos globales dinámicos y de retorno absoluto

Kamil Molendys, Unsplash

BBVA Asset Management ha lanzado una nueva gama de fondos que realizan una gestión dinámica de la asignación de activos en cartera, detectando en cada momento las distintas oportunidades de inversión y controlando simultáneamente los niveles de riesgo. Su gama Evolución (BBVA Evolución V.5 y BBVA Evolución V.10), lanzada entre finales de septiembre y principios de octubre, invierte preferentemente en ETF, mientras Quality Valor es un fondo de fondos lanzado a finales de julio. Los tres pretenden lograr retornos absolutos invirtiendo en diversos activos globales como renta variable, tipo de interés, crédito, divisas y materias primas, un posicionamiento que puede realizarse directamente o a través de fondos de gestión pasiva (ETF) en el caso de la gama Evolución o bien a través de otros fondos en el caso del Quality Valor.

Los motores de rentabilidad de estos fondos serán diversos, integrando en su gestión tanto visiones estratégicas (toma de posiciones direccionales a los distintos mercados y una especial consideración al impacto del ciclo económico en el comportamiento de los distintos activos y áreas geográficas), como visiones tácticas. Todo ello combinado con posicionamientos tomados en base a modelos cuantitativos de diversificación y control del riesgo.

La nueva Gama Evolución consta de dos fondos con distinto perfil de riesgo en función del cliente al que va dirigido: el BBVA Evolución V.5, para un perfil de inversor conservador, y el BBVA Evolución V. 10, para un perfil más moderado. Así, el fondo Evolución V. 5 tiene un objetivo de volatilidad de entre el 2% y el 4%, con una volatilidad máxima del 5%, y un objetivo no garantizado de rentabilidad anual de Eonia + 110 puntos básicos. El Evolución V. 10 tiene un objetivo de volatilidad de entre el 4% y el 8%, con un límite de volatilidad máxima del 10%, y un objetivo no garantizado de rentabilidad anual de Eonia + 250 puntos básicos.

La gama BBVA Evolución adopta la metodología de gestión dinámica de asignación de activos (conocida en inglés como DAA, Dynamic Asset Allocation), cuya principal característica es su gran capacidad de maniobra para hacer frente a las turbulencias de los mercados, tratando de limitar pérdidas en las caídas y beneficiarse de las fases positivas. Asimismo, para el control del riesgo estos fondos utilizan un sistema de detención de potenciales repuntes de volatilidad basados en el análisis de las señales a corto y largo plazo. Todo ello, unido a una estricta política de stop loss.

En cuanto a su implementación, la Gama Evolución se caracteriza por invertir en activos líquidos, preferentemente fondos cotizados (ETF), lo que dota a los fondos de una gran flexibilidad en la gestión y gran capacidad de reacción a los movimientos de mercado. Además, ambos fondos pueden utilizar instrumentos derivados, cotizados en mercados organizados, pero únicamente con el objetivo de cobertura de la cartera y sin que supongan apalancamiento.

Quality Valor: el complemento en versión fondo de fondos

Por otra parte, complementando la Gama Evolución y beneficiándose de la amplia experiencia de su plataforma de selección de fondos de terceros (Quality Funds), BBVA ha lanzado también al mercado un fondo de fondos con la misma filosofía de inversión de gestión dinámica de activos y enfoque de retorno absoluto pero cuyo principal instrumento de inversión son los fondos de gestión activa de terceros: Quality Valor.

El fondo invertirá a través de IICs financieras en una cartera formada por activos de renta variable, renta fija incluyendo bonos ligados a la inflación, materias primas y retorno absoluto. La gestión activa de estos subyacentes permitirá variar con agilidad la exposición del porfolio en función del entorno de mercado, así como adaptar dinámicamente los niveles de riesgo.

La fortaleza de este producto se encuentra no sólo en el proceso de construcción de las carteras sino, también de forma especial, en la selección de los subyacentes, que tras una exhaustiva auditoría operativa, son analizados desde el punto de vista de la consistencia de su gestión y sus resultados. Quality Valor tiene una volatilidad objetivo de en torno al 4% y un objetivo de rentabilidad de Eonia + 150 pb.

BBVA realiza con todos estos lanzamientos una apuesta clara por la gestión dinámica de activos, una estrategia que permite mejorar el binomio rentabilidad-riesgo, a través de la asignación flexible de activos para la implementación combinada de las visiones estratégicas y tácticas en los diferentes mercados.