Bernhard Langer, director de inversiones del equipo de renta variable global cuantitativa de Invesco, considera que los resultados empresariales de las grandes compañías globales serán positivos y cree que eso dará un impulso a la renta variable en lo que queda de año, con rentabilidades de entre un 5% y un 7%. “La temporada de beneficios será clave para ver si las multinacionales seguirán siendo capaces de crecer. Pensamos que habrá resultados positivos de un dígito”, afirma.
Langer, que ofreció una rueda de prensa dentro del marco del Fund Forum International 2011 de Mónaco, asegura que la inflación no será un problema a corto plazo. “Estamos en un camino aburrido, de recuperación con crecimiento por debajo de la media, del 1% o del 2% para los mercados desarrollados durante este año y el próximo”, señala.
El problema de la deuda, añade, es común a todos los mercados desarrollados y afecta a todas sus divisas. Langer está convencido de que habrá un compromiso sobre el techo de la deuda en Estados Unidos. “No esperamos grandes sobresaltos en el mercado de bonos”, dice.
Para el director de inversiones del equipo de renta variable global cuantitativa de Invesco, la corrección que han sufrido los mercados emergentes es normal. “Que nadie espere que los emergentes salven el mundo. China tiene interés en que el euro sobreviva. Tiene la necesidad de diversificar su exposición al dólar. China nos ayudará, pero no va a rescatarnos porque el precio es muy alto. Pero hay una señal clara de China, con su inversión en Europa, de que quiere mantener el euro”.
