Según las estimaciones de Inverco, los partícipes y accionistas de instituciones de inversión colectiva han contribuido al erario público con cerca de 5.000 millones de euros en los cinco últimos años a través de retenciones de rentas del capital. Además, los accionistas de las sicav han pagado otros 2.000 millones adicionales en impuestos durante el mismo periodo. Para Mariano Rabadán, la subida de impuestos propuesta en el Proyecto de Ley de Presupuestos no modificará la estructura del impuesto y servirá como ayuda para superar la crisis. En opinión de Inverco, habrá que tener cuidado en no aplicar un tratamiento fiscal diferente al del resto de países europeos si no se quiere correr el riesgo de una deslocalización del ahorro.
Para Mariano Rabadán, los fondos y sociedades de inversión constituyen en este momento el instrumento más importante para canalizar el ahorro hacia la inversión productiva. Por este motivo, en todos los países desarrollados existe una fiscalidad que no sólo intenta eliminar la doble tributación sino que, por lo general, ofrece estímulos para ahorrar a través de estas instituciones. En este sentido, recuerda que en España "las sociedades y fondos de inversión, que deberían estar exentos de tributación para cumplir plenamente el principio de neutralidad, tributan no obstante al tipo del 1% y, a su vez, el socio o partícipe tributa por los dividendos percibidos y las ganancias patrimoniales realizadas, sin beneficiarse de la deducción por doble imposición de dividendos, al tipo único del 18%, el mismo que se aplica a los restantes rendimientos del ahorro (dividendos de acciones, intereses de Letras del Tesoro, Bonos u obligaciones, intereses de depósitos o de cuentas corrientes, etc.)".
Desde Inverco recuerdan que en muchos países aplican estímulos que llevan a la exención de las ganancias que se logran a través de estos instrumentos. Como ejemplo ponen Austria, Bélgica, Dinamarca, Grecia, Holanda, Hungría, Italia, Luxemburgo, Portugal, República Checa y Suiza. En otro grupo de países, se aplica un tipo fijo, como en España. Es el caso de Alemania, Finlandia, Francia, Irlanda, Noruega, Polonia y Suecia. En el único país en el que las plusvalías van al tipo marginal del impuesto es en Reino Unido, país donde existe un producto de ahorro, los ISA (individual savings account), a través del cual el inversor puede adquirir Fondos de Inversión cuyos rendimientos quedan exentos de tributación hasta un límite anual de 10.200 libras (aproximadamente 11.700 euros).
Rabadán recuerda las aportaciones realizadas por el sector al erario público. En 2008 los ingresos para Hacienda ascendieron a 1.500 millones de euros, cifra que alcanzó los 7.000 millones si se toman los cinco últimos años.
